Santander, uno de los bancos más sostenibles del mundo

La entidad forma parte desde hace 23 años del grupo que encabeza el índice ‘Dow Jones Sustainability’, que valora los esfuerzos en materia de medioambiente y en el ámbito económico y social.

La sostenibilidad es una forma de entender el mundo y comprometerse con un futuro que garantice el equilibrio entre el crecimiento económico, la protección del medioambiente y el bienestar social. La importancia de que el sector bancario contribuya con su actividad a construir una economía sostenible y se implique en los desafíos globales ha colocado la denominada banca responsable en el núcleo de la estrategia de las entidades financieras. Se trata de tener un impacto positivo en toda la sociedad. Un desafío no es solo ambicioso, sino también apremiante.

Banco Santander es un ejemplo de este compromiso. El grupo forma parte un año más -ya son 23- del selecto club de entidades financieras más sostenibles del mundo incluidas en el índice Dow Jones Sustainability Index (DJSI). Este indicador es la principal referencia internacional para evaluar el impacto económico, medioambiental y social.

¿Qué convierte al Santander en uno de los bancos más sostenibles del mundo? Según el último análisis del Dow Jones, que este año ha invitado a 200 entidades del sector bancario a participar en el DJSI World, el banco ha alcanzado una puntuación total de 80 puntos sobre 100, con elevadas notas en todas las dimensiones del índice: gobierno (83), medioambiental (69), social (81) y las máximas puntuaciones en áreas como transparencia y reporting, gestión de riesgos y crisis, estrategia fiscal y talento.

El grupo trazó en 2019 una detallada hoja de ruta con 11 objetivos ESG (siglas en inglés de medioambiental, social y gobierno corporativo) a cumplir en cinco años, hasta 2025. Se trata de compromisos concretos para luchar contra el cambio climático, impulsar la inclusión social, la equidad de género y la diversidad, y dar apoyo a las comunidades más vulnerables.

Cuatro de estos objetivos están relacionados con el medioambiente. La filosofía #TheRightChange engloba la estrategia de la entidad para mitigar los efectos del cambio climático e impulsar la transición hacia una economía verde. Entre los conceptos agrupados bajo este paraguas están las energías renovables. Santander es líder en financiación de este tipo de proyectos y, en general, de energías verdes: tiene el compromiso de movilizar a este fin más de 120.000 millones de euros hasta 2025, cifra que se elevará a 220.000 millones con la vista puesta en 2030 (desde 2019 y hasta el pasado mes de septiembre ya ha facilitado 105.900 millones).

Además, espera obtener en 2025 todo el suministro de electricidad a partir de fuentes renovables (a cierre del año pasado representaba el 88% de la energía que consume) y ya en 2021 cumplió el objetivo de eliminar los plásticos de un solo uso en todas sus oficinas y edificios. La entidad, que es neutra en carbono en sus propias emisiones desde 2020, trabaja para alcanzar las cero emisiones netas para 2050 y apoyar a sus clientes en la transición, alineándose así a los objetivos del Acuerdo de París.

En el ámbito de inversión, Santander tiene el objetivo de alcanzar 100.000 millones de euros en activos bajo gestión clasificados como Inversión Socialmente responsable para 2025: a finales de septiembre ascendía a 64.030 millones de euros.

Inclusión financiera, la caras social del banco

También el compromiso social se ha convertido en un valioso intangible para garantizar la sostenibilidad a largo plazo. “Como gran empresa tenemos una capacidad única para tener una aportación positiva para solucionar los grandes desafíos sociales y económicos (…) Tenemos que demostrar que hacemos todo lo que está a nuestro alcance, en el día a día de nuestro trabajo, para contribuir a dar respuesta a los grandes retos globales y apoyar a la sociedad. Esto no son solo palabras. Son acciones concretas que tomamos”, ha explicado Ana Botín, presidenta de Banco Santander.

La apuesta del grupo cántabro por la inclusión financiera es uno de los ejemplos de la cara más social del banco. Tras promover la inclusión de más de 10 millones de personas entre 2019-2022, el banco se ha marcado un nuevo reto: sumar otros cinco millones hasta 2025. De momento va por buen camino: desde enero el número de perdonas ayudadas supera 1,3 millones. Esta labor ha sido reconocida recientemente en los premios Awards for Excellence 2023 de Euromoney, donde ha recibió el galardón de «Mejor banco del mundo para la Inclusión Financiera» por tercer año consecutivo.

Su estrategia está basada tres líneas de acción: el acceso a los servicios financieros básicos; facilitar oportunidades de financiación para que emprendedores puedan crear y hacer crecer sus negocios (Santander ha apoyado a 1,2 millones de micro emprendedores y ha destinado a este fin 1.200 millones de euros desde 2019); e impulsar la educación financiera para favorecer la resiliencia y el crecimiento.

El grupo ha acercado la educación financiera a más de 5,1 millones de personas en los países en los que opera, una labor que desarrolla desde hace más de 10 años con actividades impartidas por formadores voluntarios de la entidad y en la que colaboran, además, otras instituciones y ONG.

También ha apoyado a más de un millón de estudiantes, profesionales y proyectos emprendedores a través de Santander Universidades, una apuesta pionera y consolidada por la educación, la empleabilidad y el emprendimiento que desarrolla desde hace más de 27 años. Desde entonces, el banco ha destinado más de 2.200 millones de euros y colabora con más de 1.300 universidades. Precisamente esta labor ha sido reconocida recientemente por la revista Fortune, que ha incluido a la entidad en la lista Change the World 2023 de las empresas que más están contribuyendo a cambiar el mundo a mejor. Este ranking reconoce a 50 compañías cada año que ayudan a resolver algunos de los retos más importantes de la sociedad. Santander es el primer banco en la lista.

Diversidad y equidad

Banco Santander se ha marcado retos internos sobre asuntos fundamentales como la equidad de género e igualdad salarial, la comunidad LGTBI+, la diversidad étnica y cultural, y las personas con discapacidad. Si en 2018 las mujeres ocupaban el 20,5% de los cargos directivos del grupo financiero, ahora suponen el 29,3%. Un dato ya tan próximo al objetivo anunciado para 2025 -un mínimo del 30%-, que la entidad ha decidido dar un paso más allá y aumentarlo hasta el 35%. También está más cerca la desaparición total de la brecha salarial -ya de sólo un 1%-, y en el Consejo de Administración de la entidad las mujeres constituyen a día de hoy el 40%.

La entidad cántabra ocupa un año más el primer puesto del sector financiero mundial en el Índice de Igualdad de Género de BloombergBloomberg Gender-Equality Index 2023, que reconoce la excelencia y el compromiso de las organizaciones en materia de igualdad.

“En Santander siempre hemos sido conscientes de que tenemos la responsabilidad de apoyar a la sociedad, y lo vamos a seguir haciendo. Estamos decididos a ayudar a empresas y comunidades de todo el mundo y aprovechar la oportunidad para abordar desafíos mundiales como la desigualdad y el cambio climático. Esto es lo que debemos hacer, lo más responsable”, ha señalado Botín.