En términos legales, un divorcio puede llevarse a cabo de dos formas: contenciosa y de mutuo acuerdo.
Aunque la primera opción tiende a ser la más habitual, optar por la segunda opción es cada vez más recomendado. En cualquiera de los casos, contar con el asesoramiento de un abogado divorcios es lo más apropiado para esta difícil etapa.
Desde NewLex Abogados, una firma con larga trayectoria en Derecho de Familia y Matrimonial, se destacan las ventajas del divorcio de mutuo acuerdo, en especial si en el matrimonio existen hijos menores de edad o un patrimonio en común. Este equipo de abogados de divorcios en Mataró se ha distinguido por contribuir a que las partes lleven un proceso de separación rápido, eficaz y lo menos traumático posible.
¿En qué consiste el divorcio de mutuo acuerdo?
En líneas generales, un divorcio de mutuo acuerdo procede cuando los dos cónyuges coinciden en realizar la disolución del matrimonio de forma amistosa, o bien, petición es presentada por uno de ellos pero con el consentimiento del otro. De esta forma, se lleva a cabo la redacción de un convenio regulador en el que se establecen los acuerdos a los que han llegado las partes luego de su ruptura, con relación a los hijos o bienes en común.
Para llevar a cabo este tipo de trámite es necesario presentar en el juzgado competente la demanda de divorcio de mutuo acuerdo, la cual debe ir firmada por un abogado de divorcios y un procurador. Además, se debe anexar el certificado de matrimonio, certificados de nacimiento de los hijos en común si aplican, así como también volante de empadronamiento y la propuesta de convenio regulador.
Una vez admitida la demanda, se cita a los cónyuges para ratificar el convenio. En caso de que una de las partes no asista, se archiva el procedimiento de divorcio. Finalmente, el juez homologa el convenio dictando la sentencia judicial.
¿Cuáles son las ventajas del divorcio de mutuo acuerdo?
Desde NewLex Abogados destacan que son múltiples las ventajas de esta modalidad también conocida como divorcio exprés. Una de las más destacadas es que se trata de un procedimiento más económico. A diferencia del divorcio contencioso, en el que se requiere que cada una de las partes cuente con un abogado divorcios y un procurador, en el de mutuo acuerdo, es posible la presencia de uno solo para ambos casos, lo que reduce considerablemente los costes del trámite.
Otra ventaja importante es la celeridad de este proceso, ya que permite poner fin a la relación matrimonial de forma definitiva en un periodo de tiempo menor. Generalmente, el divorcio de mutuo acuerdo suele llevar entre 1 y 3 meses, mientras que por la vía contenciosa puede tardar hasta 18 meses. Finalmente, en los casos donde existan hijos, el divorcio de mutuo acuerdo permite una separación más llevadera, sin conflictos o disputas legales que podrían afectar el bienestar emocional y físico de estos.