En medio de La Mancha, en la provincia de Ciudad Real se encuentra una pequeña pero importante reserva natural: El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. Probablemente, muchos sean conocedores de la fama que los paisajes creados por el embalse de Daimiel tienen, formando unos de los paisajes más fascinantes del territorio español gracias a la mezcla entre los humedales, los numerosos árboles y arbustos que cobijan a la fauna de La Mancha. Pero el parque nacional es mucho más que eso.
El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, situado al suroeste de la provincia y escondida en La Mancha, cobija a la naturaleza en la isla que divide el embalse en dos, de una extensión de 17 kilómetros cuadrados donde el paisaje se alterna entre el marco árido de la zona y la presencia de agua en abundancia. Y es por su belleza que el parque fue declarado como Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 1992.
7Visitando el parque

Los visitantes que quieran disfrutar de este paraíso natural están aconsejados a informarse con antelación acerca de las recomendaciones que propone el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. Estos se pueden ver en su página web. En ella se incluyen, consejos para disfrutar de la visita como temperatura adecuada, material recomendado, tipo de vestuario adecuado… Si obedecemos estas recomendaciones, la visita sin duda resultará agradable para todos.
Los que lo deseen, tienen la posibilidad de coordinar con el parque visitas guiadas de 6 – 8 horas para poder conocerlo de una forma más detallada. Estas visitas consisten en recorrer la mayor oportunidad posible para ver el paisaje, la fauna y plantar, además de conocer la historia del parque.