Al ajillo, en crema y en guarnición: las mejores formas de cocinar champiñones

Los champiñones comunes o el Agaricus bisporus, son el hongo comestible más utilizado para la cocina. Son muy apreciados por su sabor neutro y por su baja cantidad de calorías (apenas 20 kcal por cada 100 gramos), la cual hace que valga para dietas. Además, es rico en fibra, vitamina B6, vitamina C, vitamina D, potasio y niacina.

En España, se produce mucho champiñón, así que podremos encontrarlo en cualquier sitio para comer y hacer recetas. Vamos a ver cuáles son las mejores formas de cocinarlo, incluyendo el champiñón al ajillo, la crema o cómo utilizarlos como una guarnición, entre otras muchas formas.

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Receta de champiñones al ajillo

Comenzamos con la mítica receta de champiñón al ajillo. Es un plato que vemos comúnmente en bares y restaurantes, pero no tendremos por qué ir allí. En realidad, podemos hacer nuestra propia versión en nuestra casa sin demasiada dificultad. Para ello, necesitaremos un kilo de champiñón, 20 cucharadas grandes de aceite de oliva virgen extra, 3 dientes de ajo, 10 ml de zumo de limón y especias al gusto, eligiendo generalmente perejil, sal y pimienta negra. Además, puedes añadir una cayena.

Después de cepillar bien el hongo, los colocamos con agua fría y el zumo de limón en un bol para lavarlo. Los secamos con un paño limpio y los picamos, poniéndolos al fuego en una cazuela de barrio, con el aceite y los ajos laminados y dorados previamente. Ahora añadimos el champiñón, salpimentamos y ponemos a fuego medio durante 10 minutos. Para terminar, subimos el fuego y estamos 5 minutos más mientras removemos. Finalmente, servimos con algo de perejil por encima.

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