En los últimos años, los vapeadores han ganado popularidad como una supuesta alternativa más segura al tabaco tradicional. Sin embargo, a medida que aumenta su uso, también se acumulan evidencias que sugieren que los vapeadores no son tan inocuos como se pensaba inicialmente y que tampoco son efectivos para ayudar a dejar de fumar.
6Otros riesgos que están asociados

Además de los riesgos asociados con los vapeadores, también se han descrito numerosas intoxicaciones y efectos adversos, algunos de ellos graves. Aunque se ha promocionado su uso como una herramienta efectiva para dejar de fumar, la realidad es que pocos fumadores logran reemplazar completamente el consumo de tabaco por el vapeo.
Las pipas de agua, conocidas como shishas o cachimbas, también han ganado popularidad, especialmente entre los jóvenes. Estos dispositivos se utilizan para fumar un tipo especial de tabaco con diferentes sabores y una sesión puede durar hasta 80 minutos, con una cantidad de humo inhalada equivalente al de 200 cigarrillos.