Kazajistán apuesta por la colaboración económica, una decisión adoptada desde el referéndum de la nueva constitución del joven país y ex satélite de Rusia. Así lo ha asegurado Roman Vassilenko, viceministro de Asuntos Exteriores de Kazajistán, a preguntas de MERCA2 respecto a los objetivos fijados por el Ejecutivo kazajo en sus relaciones con la UE.
De nuevo, con una diplomacia exquisita, Vassilenko deja claro que la cooperación es única y exclusivamente económica, sin tomar partido respecto al conflicto de Rusia en Ucrania. Asimismo, el viceministro ha señalado que en ningún caso se reconocerán las zonas ucranianas en manos de Vladimir Putin, por más que el mandatario ruso lo pida.
En el marco del primer Foro Internacional de Astaná, capital de Kazajistán, y en la que participan importantes personalidades públicas de la política y economía, así como consejeros delegados de empresas internacionales punteras, Vassilenko ha vuelto a hacer gala de una diplomacia fácil de entender en occidente.
PETRÓLEO Y GAS, EL PESO DEL PIB EN KAZAJISTÁN
Tan sólo busca los mejores acuerdos económicos para mostrar la potencia de Kazajistán, un país conocido por tener todos los elementos de la tabla periódica en el subsuelo. El petróleo y gas, así como la industria se abren camino por la principal arteria que une Asia con Occidente. La vía por Europa alcanza a Polonia y Alemania, mientras que al este se abre hasta China, pasando por la vecina China y al sur por India. Al norte, la todopoderosa Rusia, en conflicto con Ucrania.
El ministro de Asuntos Exteriores, el primero en reunirse a primera hora de la mañana de este miércoles pasado con los medios internacionales, ha mostrado las bondades de Kazajistán como aliado económico y ha puesto de manifiesto la ubicación geoestratégica del país, en el corazón de Asia Central. El crecimiento de Kazajistán en 2022 fue del 3%, por encima de numerosos países europeos asolados por la inflación. Ahora, el potencial de crecimiento también es importante, según las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
LA UE TIENE UN PESO DEL 48%
En el Fórum Internacional de Astaná, Vassilenko y el Gobierno de Tokáyev buscan una mayor relación internacional, pero siempre de la mano izquierda de la diplomacia en una región que ocupa el noveno lugar del mundo por extensión. Encima de la mesa están las relaciones directas con la UE, cuyo peso en las inversiones extranjeras directas en el país kazajo alcanza el 48% del total. Pero Kazajistán no sólo busca una salida hacia Europa, sino también hacia los emergentes, incluyendo los estrechos lazos con Brasil, China, Suráfrica e India, con Rusia como un importante apoyo en cuanto a la economía se refiere.
Vassilenko, como el resto del Gobierno, reniega de un pacto político con Rusia. Esa vía es prácticamente imposible y más en la situación actual. Por esta razón, Kazajistán no sólo ha cerrado la puerta a este tipo de acuerdos, sino que ha dejado claro su posición sobre el reconocimiento de las zonas invadidas de Ucrania por parte de Rusia, como es el Dombás.
Kazajistán ha mostrado todas sus cartas en este Fórum Internacional. No hay nada que esconder cuando el liderazgo y su reconocimiento están más que en juego. El papel de mediador y árbitro en esta zona tan crucial para el comercio entre Europa y Asia es de calado, una responsabilidad muy elevada para un país que ha cerrado sus heridas internas tras dar luz verde al referéndum.
EL RUMBO DE TOKÁYEV PARA KAZAJISTÁN
Los debates en este foro pasan por los principales objetivos que se ha puesto como reto la UE. En primer luegar, la transformación energética, mientras el cambio climático, la seguridad alimentaria y la agricultura ocupan un espacio importante en esta agenda. Como no podía ser de otra manera, las palabras de Tokáyev darán nuevas pistas sobre el rumbo a seguir en el país.
Kazajistán busca pertenecer al exclusivo club de los conocidos como BRICS, pero únicamente para la formación de una zona económica, con estrechos lazos multilaterales, que Valissenko ha definido como «multivectoriales».
«Kazajistán muestra su interés en esta colaboración, como herramienta de cooperación entre sus miembros», ha señalado el dirigente ejecutivo. De esta forma, se obtendría un gran valor añadido para la región y la asociación. De hecho, para mostrar su intención de estrechar lazos con América Latina, Kazajistán abrirá embajada en México.
Como muestra de la importancia de la función de Kazajistán, el país ha propuesto dar vía a la ruta de la Asia Central, que empieza en Japón y China, y continúa por India y la zona de los países como Uzbequistán y Kirguistán, puertas hacia Oriente Medio y Próximo. El punto crucial para unir todas las rutas pasaría inexorablemente por el Mar Caspio, puerta de entrada y salida del país.
EL GRAN PROYECTO DE KAZAJISTÁN
Esta artería dejaría la puerta abierta a abrir un corredor en paralelo al transiberiano, una línea férrea que atraviese los más de 3.000 km que recorren de este a oeste el país. Esta arteria empalmaría directamente con las europeas, fortaleciendo así el tráfico de mercancías e incluso serviría como solución para solventar los cuello de botella que tantos dolores de cabeza han dado a Occidente en los últimos dos años.
Pero para desarrollar esta línea se necesitan inversiones y un estudio milimétrico para evitar fiascos a causa del clima extremo. Por un lado, habría que dotar a la línea férrea con los mejores materiales para evitar la repentina oxidación durante el verano, mientras en invierno el principal temor son los muros de nieve y hielo.
Por el momento, el país está muy centrado en estos acuerdos, más después de haber recibido el equivalente al 30% del PIB de España en inversiones. Pese a las desorbitadas cifras para un país tan joven, de apenas 32 años, Vassilenko ha fijado el objetivo en disparar la captación de inversión extranjera a más de 25.000 millones de dólares para 2026.
Kazajistán, además, busca tener su propia voz en los foros más importantes del mundo, sabiendo que las relaciones con Rusia deben ser tranquilas y sosegadas, más cuando una frontera de 7.500 km es muy complicada cuando dos países que son socios económicos, sin entrar en el terreno político. Todo ello, da lugar a una búsqueda constante del diálogo.