La DGT va a jugar un papel muy importante en tus próximas vacaciones, sobre todo si tienes pensado coger el coche. Como responsable de la seguridad vial en todo el territorio español, la Dirección General de Tráfico nos sensibiliza para conducir con prudencia y respetando las normas; pero allí donde no llega el sentido común, actúan las sanciones. ¡Y las hay para todos los gustos! O mejor dicho, disgustos de los conductores.
Además de los infalibles radares de tráfico, la DGT también pone multas por conducir padeciendo determinadas enfermedades, si no respetas las nuevas señales o incluso tras haber usado Listerine antes de conducir. De cara a las vacaciones y los desplazamientos a partir de mayo, este organismo redobla sus esfuerzos y pone el foco en un elemento crucial del vehículo: el retrovisor. Toma nota de lo que te vamos a contar si llevas algo colgado de este espejo, ya que podrías meterte en serios problemas.
3LA DGT ESTIPULA CÓMO LLEVAR EL RETROVISOR INTERIOR

De acuerdo con el artículo 19 del Reglamento General de Circulación, siempre hay que asegurarse de que «la superficie acristalada del vehículo permita la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circule, sin interferencias«. No cumplir esta norma relativa a los retrovisores conlleva una sanción de 200 euros, ¿pero a qué se refiere exactamente la DGT con las interferencias?