El presidente de Brasil, Lula da Silva, ha aprovechado su visita a China para asistir a la toma de posesión de la recién nombrada presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) del grupo Brics, Dilma Rousseff, y explorar las oportunidades de una mayor colaboración entre la entidad bancaria y su país.
La expresidenta de Brasil fue confirmada por los miembros del grupo Brics el pasado 24 de marzo, tras contar con el apoyo firme de Lula da Silva para optar a este cargo. En su discurso, Rousseff ha enfatizado el compromiso del banco de apoyar los objetivos de desarrollo sostenible de Brasil y ha destacado la importancia de la visita presidencial para fortalecer la cooperación con su país de origen.
«Convertirse en presidenta del NBD es, sin duda, una gran oportunidad para hacer más por los países del grupo Brics, los mercados emergentes y los países en desarrollo, así como por mi propio país, Brasil», ha afirmado. Por su parte, el mandatario brasileño ha resaltado que el banco cumple un papel importante para crear un mundo con menos pobreza, menos desigualdad y más sostenibilidad.
Durante la visita, el presidente Lula discutió con la alta gerencia del NBD los proyectos en curso y potenciales del banco en Brasil en áreas como energía renovable y limpia, infraestructura de transporte moderna y movilidad urbana, eficiencia en agua o saneamiento.
«De cara al futuro, el banco seguirá apoyando los esfuerzos de Brasil destinados a promover el desarrollo sostenible y el crecimiento económico inclusivo», ha mencionado el organismo multilateral en un comunicado.