Las acciones de la compañía se desploman hasta un 9% en la Bolsa de Londres
La cadena textil británica Next ha revisado a la baja su previsión de subida de los precios para el ejercicio en curso ante la expectativa de unos costes más bajos, particularmente en el segunda mitad del año, según ha anunciado la compañía, que anticipa un ejercicio «difícil».
De este modo, en la presentación de sus cuentas del último año fiscal, que concluyó en enero de 2023, Next ha anunciado que prevé una subida de los precios del 7% en primavera/verano, frente al incremento del 8% previsto anteriormente, mientras que para la temporada otoño/invierno espera subir los precios un 3%, la mitad del 6% proyectado previamente.
«Ahora creemos que los aumentos de precios en la segunda mitad serán sustancialmente más bajos de lo que inicialmente temíamos», ha señalado la firma textil, que atribuye esta evolución a la reducción significativa en los costes de flete a medida que las cadenas de distribución recuperan la normalidad, así como a la mejora en los precios a puerta de fábrica por la mayor capacidad de fabricación y el traslado de producción a fuentes de suministro más rentables.
«Nos hemos preparado (y presupuestado) para un año difícil», ha indicado Michael Roney, presidente de Next, quien ha subrayado la importancia de seguir mejorando la gama de productos y administrar «sin descanso» los costes, mientras se desarrollan nuevas oportunidades comerciales.
En su último ejercicio fiscal, Next obtuvo un beneficio neto atribuido de 711,7 millones de libras (810 millones de euros), lo que representa un incremento del 5% en relación con el anterior año fiscal, mientras que las ventas de la cadena textil aumentaron un 8,8%, hasta 5.034 millones de libras (5.728 millones de euros).
De cara al ejercicio en curso, Next anticipa una caída de las ventas del 1,5%, incluyendo un retroceso del 3% durante el primer semestre de su ejercicio y del 0,2% en la segunda mitad. Las acciones de Next llegaban a caer un 9% en la Bolsa de Londres tras la apertura de la sesión, aunque, superada la primera hora de negociación, lograban enjugar las pérdidas a menos del 7%.