Consejos para conseguir una hipoteca lo antes posible

Unas buenas finanzas se relacionan con una planificación y control de los gastos e ingresos. Siempre hay maneras de mejorar la economía doméstica y sacarle mayor rendimiento a nuestro capital; no obstante, si no sabemos cómo hacerlo, no podremos anticiparnos a imprevistos. Asimismo, si no tenemos un objetivo de ahorro, será más complicado comprar una vivienda o un vehículo nuevo.

La crisis económica actual ha dado lugar a que se tomen medidas restrictivas por parte de los bancos. Hoy en día, solicitar una hipoteca para jóvenes puede ser un verdadero reto, ya que las condiciones para acceder a esta financiación están sujetas a una serie de requisitos y unas garantías que no siempre son fáciles de cumplir.

Consejos financieros para adquirir un crédito hipotecario

La compra de una casa es una de las inversiones más importantes para la mayoría de las personas. El comprador adquiere una deuda bastante elevada, aunque tenga la opción de pago durante un largo período de tiempo. No obstante, con una buena planificación financiera y una hoja de ruta realista, lo más seguro es que pueda hacer frente a las cuotas mensuales.

En el caso de los jóvenes, tal como hemos indicado anteriormente, la situación se complica algo más. Hoy en día, los bancos solicitan una serie de garantías y una seguridad laboral mayores que antes. No obstante, existen entidades financieras que conceden hasta el 90 % del valor del inmueble, a lo que se suman las ayudas del Gobierno.

A continuación, te ofrecemos una serie de consejos muy útiles si tienes previsto comprar una casa.

  • Definir unos objetivos financieros. Es necesario definir correctamente unos objetivos realistas y cuantificables para hacer un plan de pagos. En este sentido, es importante definir un calendario a corto, medio y largo plazo para una correcta interpretación.
  • Capacidad de endeudamiento. En función de tus ingresos tendrás que hacer una planificación de entradas y salidas. Intenta desglosarlos en un documento para conocer las obligaciones y gastos innecesarios.
  • Analizar la situación financiera actual. En este apartado, se trata de conocer el estado de nuestras cuentas, las obligaciones reales, como el pago de la luz, el agua, la cuota del coche, el seguro de vida, etc.
  • Establecer un plan de acción. Tanto si se trata de comprar un inmueble, un coche u organizar las vacaciones, hay que definir una meta específica para reducir los gastos innecesarios.
  • Capacidad de ahorro. Actualmente, esta puede ser una de las tareas más complicadas, aunque si se aplica la regla del 50-30-20, podrías sorprenderte con sus resultados. Consiste en derivar el 50 % de los ingresos para tus necesidades básicas, el 30 % para los gastos prescindibles (ocio, viajes, etc.) y el 20 % para el ahorro.

En conclusión, la economía doméstica no solo se trata de sumar y restar, sino de tener un control financiero con un plan organizado. Si no sabes cómo hacerlo, lograr tus objetivos o cómo manejar tus ahorros de forma correcta, no dudes en ponerte en contacto con un consultor financiero de OVB para encontrar la mejor solución.