Los mayores bancos españoles, Santander, BBVA, CaixaBank y Sabadell, no cuentan con exposición a Credit Suisse o es prácticamente insignificante, lo que descartaría un posible impacto directo en las cuentas de estas entidades en el caso de un deterioro acelerado en la situación del banco suizo, según han informado fuentes del sector.
El Banco Central Europeo (BCE) ha empezado a contactar con los bancos europeos que supervisa directamente para conocer qué posible exposición tienen a Credit Suisse. En el caso de España, estos contactos se están realizando a través del Banco de España, según fuentes financieras consultadas. Desde el BCE han declinado hacer comentarios sobre sus posibles actuaciones a este respecto.
En todo caso, la actuación del regulador bancario europeo no presupone de por sí una debilidad en el sector o en la entidad suiza, sino que es «lo normal» ante una situación de estrés como la vivida en este momento.
De hecho, mas allá de que el BCE esté solicitando datos a los equipos de riesgos de las entidades que supervisa, los propios bancos lleven tiempo realizando sus propios análisis con respecto a Credit Suisse, porque la situación «no viene de ahora».
Tras el colapso en Estados Unidos del Silicon Valley Bank, del Signature y del Silvergate, las alarmas han saltado en Europa después de que el banco suizo haya registrado una abultada caída en Bolsa ante el rechazo de su principal inversor de acudir en ayuda en su ayuda con una ampliación de su inversión.
La entidad financiera ha llegado a caer este miércoles más de un 30%, aunque finalmente han cerrado la sesión cotizando en 1,70 francos (1,74 euros), por lo que la contracción se ha limitado al 24,1%.
Esta situación se ha producido después de que su principal accionista, el Saudi National Bank, se haya negado a aportar más capital para la entidad, ya que superaría una participación del 10%, algo que ha rechazado ante la prensa anglosajona esgrimiendo motivos regulatorios.
Además, el banco suizo ha informado recientemente del retraso en la publicación de su informe anual de 2022 al haber recibido un aviso sobre cuestiones técnicas por parte del regulador financiero de Estados Unidos. La entidad también ha reconocido haber detectado una «debilidad material» en el control interno de la información financiera.
Los inversores han trasladado su temor a todas las bolsas europeos, con los bancos como principales penalizados. Las entidades españolas no han escapado a este efecto y han registrado caídas significativas en la Bolsa. Sabadell ha cerrado como ‘farolillo rojo’, con una caída del 10,49%, seguido por BBVA (-9,60%). Con menores descensos han cerrado Santander (-6,89%), CaixaBank (-6,72%), Bankinter (-6,46%) y Unicaja Banco (-6,06%).