Encontrar telarañas es algo de lo más común tanto en la naturaleza como en cualquier rincón de nuestra casa. Estos hilos finos de apariencia son considerados el material fibroso más resistente que existe.
Se trata de un material más resistente, incluso que el acero, a esto se le suma su elasticidad, puesto que la tela de araña puede estirarse hasta conseguir entre dos y cuatro veces más su longitud original sin romperse. La tela de araña más resistente de todas fue descubierta en las glándulas de la llamada araña de corteza de Darwin, que habita en la isla africana de Madagascar.
Una investigación prueba que la tela de araña de la araña de corteza de Darwin posee una resistencia y una flexibilidad espléndidas, constituyendo el material biológico más resistente del mundo.