Podemos asegurar, sin miedo a equivocarnos, que las albóndigas son uno de esos platos que le gustan a todo el mundo. Es una receta tradicional que consiste en pequeñas bolitas de carne (aunque se pueden hacer deliciosas alternativas vegetales) condimentadas y servidas con una rica salsa. Existen un montón de variaciones de este plato y realmente sea cual sea el ingrediente principal o la forma de preparación siempre quedan ricas. Hoy queremos traer una opción un poco más ligera, para empezar el año comiendo bien, pero sin renunciar los sabores que más nos gustan. Algo que es posible, simplemente haciendo unos cambios.
1UNAS ALBÓNDIGAS LIGERAS Y SABROSAS
Para esta receta de albóndigas vamos a usar pollo en vez de carne roja, y vamos a cocinarlas al horno en vez de usar la sartén o la freidora. Vamos a aromatizarlas con especias y hierbas para darles mucho sabor y vamos a darle un toque especial con un queso italiano. El resultado es increíblemente sabroso pero con un aporte de grasas y de calorías significativamente menor en comparación con las albóndigas tradicionales de ternera y fritas. Y todo ello sin reducir su sabor. El queso que vamos a usar es el Grana Padano, que aporta ese sabor umami que os resulta tan irresistible. Además, vamos a acompañarlas con una salsa clásica de tomar al estilo italiano, y después lo vamos a gratinar todo en el horno. Sin duda un plato delicioso y saludable para toda la familia. A continuación te explicamos el paso a paso.