La eterna pasión turca de BBVA con Garanti: la inflación y Onur Genç

BBVA aún pierde cerca de 1.800 millones de euros desde que inició su opa sobre el banco turco Garanti, una operación que se ha podido compensar en parte tras la subida de la banca otomana en 2022. La entidad financiera del país euroasiático se disparó un 100%, alcanzando una capitalización bursátil de 6.400 millones de euros al cambio actual, unos 126.000 millones de liras turcas. La entidad española presidida por Carlos Torres, no obstante, ha invertido un total de 8.300 millones de euros desde 2010.

No obstante, Turquía presenta problemas de calado para el BBVA. El mismo Banco de España mostró su «especial preocupación» por la «elevadísima inflación y la acumulación de desequilibrios financieros» en el informe económico de otoño. El supervisor puso de manifiesto que el endurecimiento generalizado de las condiciones financieras podría tener efectos particularmente adversos en aquellas economías emergentes con niveles de endeudamiento más elevados y con mayores necesidades de financiación externa. «Entre los países de importancia sistémica para la banca española, destaca el caso de Turquía como uno de los países vulnerables», reveló en el informe.

EL BANCO DE ESPAÑA AVISA AL BBVA SOBRE TURQUÍA

A pesar de las turbulencias, las cuatro entidades financieras más fuertes del país han reaccionado al alza en el último trimestre del pasado año, con un nivel de reservas muy superiores a los niveles mínimos exigidos, hasta alcanzar más de 9.400 millones de euros -unos 10.000 millones de dólares-. En el caso de Garanti, las reservas se sitúan 1,6 veces por encima de los niveles de 2021; mientras Akbank e Isbank registran las reservas más elevadas en términos absolutos, superiores a los 50.000 millones de liras, unos 2.500 millones de euros al cambio actual, según los datos recogidos por Bloomberg.

El caso de Turquía es diferente, con un gobierno que condiciona las decisiones monetarias que se llevan a cabo en el banco central turco, manejando los ‘hilos’ al antojo de Erdogán

Además, las entidades financieras han reforzado su capital en otros 15.900 millones de liras, unos 800 millones de euros. El Garanti lo ha hecho con 8.000 millones de liras, unos 400 millones de euros, por encima de los 6.500 millones de liras del Isbank y de los 1.400 de Akbank. Las públicas Vakifbank y Halkbank tendrán aún más inyecciones de capital para poder alcanzar los requisitos exigidos.

Este colchón es fundamental para navegar en el fuerte oleaje de la economía turca, a merced de una brusca volatilidad y unas elecciones presidenciales en junio. De hecho, el último dato muestra una nueva escalada vertical de la inflación. El IPC otomano se sitúa en el 64% tras haber alcanzado un ritmo de crecimiento del 84,39% en noviembre y otros 85,5% en octubre, cuando alcanzó máximos no vistos desde hace 24 años.

LA INFLACIÓN GALOPANTE AVIVA A LA FILIAL TURCA DE BBVA

«Por ahora, hemos visto un descenso en las tasas de inflación de muchos países, en parte, ante el efecto de las subidas de tipos de interés, aunque si bien es cierto que aún siguen siendo elevadas», ha considerado Diego Morín, analista de IG Markets. «El caso de Turquía es diferente, con un gobierno que condiciona las decisiones monetarias que se llevan a cabo en el Banco Central de Turquía, manejando los ‘hilos’ al antojo de Erdogán», ha explicado el experto a preguntas de MERCA2.

Carlos Torres, presidente de BBVA
El presidente de BBVA, Carlos Torres Vila.

Lejos de materializar una política monetaria tradicional, el Banco Central de Turquía ha rebajado los tipos de interés al 9% en apenas quince meses. En octubre del pasado 2021 los tipos se situaban en el 16%. De esta forma, realiza una política monetaria ortodoxa, todo con el fin de mantener el crecimiento económico a toda costa. No obstante, el país está a un paso de entrar en recesión, al registrar una caída del PIB al -0,1% en el tercer trimestre de 2022.

Lejos queda la subida de 2021 y el crecimiento interanual del 7% de los primeros tres meses del año pasado respecto al mismo trimestre de 2021. Con todo, la lira turca se ha hundido a nuevos y renovados mínimos históricos frente al dólar y el euro, una debilidad que ha provocado el éxodo de la población a países europeos, especialmente a Alemania.

EL BCE, CON LA LUPA PUESTA EN LA CONFRONTACIÓN ENTRE TORRES Y GENÇ

«La situación de la lira turca es compleja, y me mantendría fuera de la divisa si tuviera oportunidad, ya que por ahora, podría continuar marcando mínimos frente a estas dos divisas si la situación no se revierte», ha analizado Morín.

En el caso del BBVA, desde el propio banco hablaban que tenían la situación de Turquía “controlada”, en parte, después de su operación de opa sobre Garanti, con buen rendimiento en los últimos meses, pero también coge fuerza las diferencias entre Carlos Torres y Onur Genç, con el BCE mirando de reojo los posibles movimientos. Por tanto, pese a que su filial tiene buen rendimiento, cualquier disputa por el sillón podría hacer tambalear al banco español.

Con todo, Garanti ha mantenido a raya la morosidad, hasta situarla en el 2,9%, tras vender activos tóxicos durante parte de este 2022. El consejero delegado de BBVA, el turco Onur Genç, ve aún potencial en Turquía y espera que la opa sobre el 100% por parte de BBVA sea una «magnífica inversión». Sin embargo, este idilio turco de BBVA se está mirando con lupa desde el Banco Central Europeo debido a los grandes riesgos.

LA LIRA SE HUNDE FRENTE AL EURO Y EL DÓLAR

De hecho, la confrontación entre Torres y Genç es vox pópuli en el sector. La lucha por tener el control de la segunda entidad financiera con mayor valor bursátil en Turquía se mantiene en todo lo alto. En plena batalla, Torres tuvo que salir al paso de los rumores al asegurar que mantendrá al otomano como consejero delegado. «No se puede tener mejor persona como consejero delegado», aseguró en septiembre. «Es un fuera de serie», afirmó. El BCE permanece muy atento a los movimientos.

De cara a entrar en el valor turco, Morín, dada la alta volatilidad que presentan las acciones de la entidad, que cotiza cerca de máximos, no tomaría posiciones en Garanti. En este sentido, optaría «por una empresa que no esté condicionada por factores ‘externos’». A su juicio, BBVA ha rentabilizado la opa, puesto que los títulos de Garanti han subido prácticamente un 100%, «pero también hay que tener en cuenta la evolución de la lira frente al euro».

TURQUÍA, UN PAÍS PARA NO INVERTIR EN 2023

«Se me antoja ahora mismo hablar de inversión clara en Turquía, con un situación económica muy tensa y con la inflación que continúa siendo elevada», ha sostenido. «Si bien es cierto que algunos fondos manejan inversiones interesantes en el país, ya que se postula como un emergente interesante, aunque no creo que 2023 sea un año para introducirse en este tipo de mercados», ha finalizado.

Para Bloomberg, «los riesgos de los bancos turcos son manejables para poder absorber una mayor debilidad potencial de la lira frente al dólar», un cruce que podría irse al nivel de los 36, frente al 18,7 actual. Si bien se esperaba un ascenso a la zona de los 29 unidades en el segundo trimestre del año. Así, la lira no se ha hundido más debido a esa política poco ortodoxa del banco central turco.

Álvaro J. Medina
Álvaro J. Medina
Madrileño en Barcelona. Apasionado de la actualidad política, la Economía y empresas. He pasado por el grupo Intereconomía y Vozpópuli. Ahora, en MERCA2.es, INVERSIÓN.es y MONCLOA.com para seguir informando. "Si no lo puedes explicar, es que no lo sabes". Si tienes algo que contarme: alvaro.medina@merca2.es