Repsol se prepara para una flexibilización de las limitaciones todavía vigentes que le impiden operar con normalidad en Venezuela. La decisión de la Administración de Estados Unidos de permitir a la petrolera Chevron retomar la producción y extracción de petróleo (así como de derivados) procedentes de las empresas conjuntas que tiene con la nacional PDVSA impulsará la actividad de los grupos europeos, como Repsol y ENI, tanto en el ámbito de la importación, como de la producción y el refino.
REPSOL Y LA DEUDA DE PDVSA
Tal como avanzó MERCA2 el pasado marzo, el acercamiento de la Casa Blanca al régimen de Nicolás Maduro permitirá también a la empresa española recuperar una parte de los más de 200 millones de euros que le adeuda la petrolera estatal venezolana. La idea es que al menos una parte se abone en especie –es decir, en barriles de crudo– tal como acordaron Repsol y PDVSA en 2019.
La empresa española, que opera en el país latinoamericano a través de filiales, elevó en 2021 las provisiones por sus actividades venezolanas hasta los 352 millones de euros, lo que suponía multiplicar casi por cinco las anotadas en 2020. La empresa que dirige Josu Jon Imaz daba por perdidos 223 millones en por préstamos a PDVSA, a los que habría que sumar otros 129 millones en concepto de inversiones.
Desde el pasado 26 de noviembre, Chevron ya puede retomar buena parte de la actividad en el país y espera elevar la producción en unos 125.000 barriles de crudo diarios. Según confirman a este diario fuentes de la Comisión Europea, el próximo paso será flexibilizar las sanciones que todavía dificultan a Repsol y a ENI operar con normalidad. Ambos grupos han vuelto a trabajar con el crudo pesado venezolano después de que el propio Imaz anunciara el pasado junio que comenzaba una «nueva dinámica» en su relación con el país latinoamericano.
PRESIÓN DE VENEZUELA
Además de la labor diplomática que están realizando a tres bandas la Administración de EE.UU., la Comisión Europea y el propio Gobierno de Maduro, la Cámara Petrolera de Venezuela (CPV) está presionando para levantar todas las restricciones a las empresas extranjeras del sector energético. Su objetivo es lograr que la producción alcance los dos millones de barriles de petróleo diarios, lo cual supondría casi triplicar los 693.000 que se extraen en estos momentos.
Según ha indicado a EFE el presidente de la CPV, Enrique Novoa, «tenemos la expectativa de que haya un pronunciamiento que permita que las empresas operadoras europeas puedan acercarse también y reactivar, de una manera más amplia, sus operaciones en Venezuela, incluyendo, por supuesto, lo que tiene que ver con la comercialización de productos». Por lo tanto, ahora la pelota está en el tejado de la Casa Blanca, que debe «indicar o establecer algún tipo de autorización o de consentimiento para que las empresas europeas puedan también incorporarse».
JESÚS FARÍA (VENEZUELA): A CHEVRON «LE SEGUIRÁN OTRAS EMPRESAS» QUE BUSCAN ALTERNATIVAS A LOS HIDROCARBUROS RUSOS
Por su parte, el responsable de la Comisión de Economía y Finanzas del Parlamento de Venezuela, Jesús Faría, ha confirmado que a Chevron «le seguirán otras empresas» como consecuencia de la necesidad que tienen los gobiernos occidentales de encontrar alternativas a los hidrocarburos rusos. Las sanciones impuestas por EE.UU. y la Unión Europea al Kremlin suponen una gran oportunidad para Venezuela, lo cual está incluso limando asperezas entre el Gobierno y la oposición en el país.
CHEVRON, PUNTA DE LANZA
La idea, por lo tanto, es que Chevron sirva de punta de lanza para que Repsol y la italiana ENI sean las siguientes en ir poco a poco normalizando la situación en Venezuela tras años de sanciones. Ha sido el Departamento del Tesoro de EE.UU. quien –a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC)– ha otorgado una licencia a la empresa norteamericana reanudar «operaciones limitadas» de extracción de petróleo en Venezuela.
Según el comunicado oficial de este organismo, es el primer paso basado en «proporcionar una reducción de sanciones específicas basado en medidas concretas que alivien el sufrimiento del pueblo venezolano y apoyen la restauración de la democracia».
Fuentes diplomáticas indican a este diario que existe disposición por parte de la Casa Blanca para ir retirando de forma progresiva el resto de bloqueos siempre «que el diálogo con Venezuela se plasme en resultados concretos que certifiquen que existe compromiso por todas las partes».