Válvulas endobronquiales: nueva opción para tratar a pacientes con enfisema grave

Los pacientes con enfisema sufren una destrucción progresiva de sus alveolos pulmonares. Al destruirse las fibras elásticas del pulmón, éste se va haciendo más grande al quedar el aire atrapado. Estos pacientes padecen una sensación continua de falta de aire. Hasta ahora los pacientes con esta patología eran tratados con broncodilatadores, corticoides, rehabilitación e incluso con cirugía de reducción pulmonar. A todas estas herramientas el Hospital Universitario Quirónsalud Madrid ha incorporado la colocación de válvulas Zephyr que «ocluyen la vía aérea de una zona del pulmón distendido y se colocan a través de broncoscopia. La colocación de este dispositivo permite que el pulmón afectado disminuya de tamaño y que funcione de forma más eficaz», explica la Dra. Lorena Comeche, jefa asociada del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid. «Los pacientes indicados a los que se ha implantado este dispositivo muestran menor dificultad para respirar, mayor capacidad de realizar ejercicio, mejora en su función pulmonar y calidad de vida».

No todos los pacientes con enfisema se pueden beneficiar de la utilización de esta novedosa técnica, sino que «está indicada para pacientes con una hiperinsuflación asociada a enfisema grave con zonas del pulmón con poca o ninguna ventilación colateral. La selección de los pacientes es fundamental para que el tratamiento sea eficaz», recalca el Dr. José María Echave-Sustaeta, jefe del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, que detalla que antes de implantar estas válvulas en el pulmón del paciente es necesario realizar pruebas de función pulmonar, cuantificación radiológica del enfisema y análisis de los volúmenes de los lóbulos pulmonares a través de un software específico.

«La implantación de este dispositivo se lleva a cabo en quirófano mediante la realización de una broncoscopia. Esta intervención tiene una duración de entre 30 y 60 minutos en el que se colocan entre tres a cinco válvulas para ocluir un lóbulo completo del pulmón», concluye la Dra. Comeche.