Google ha recibido una demanda por difundir publicidad engañosa a través de la promoción de uno de sus productos estrella: Pixel 4. Según los últimos informes del portal Techspot, Google utilizó la imagen de varios influencers para promocionar su smartphone, donde contaban sus experiencias sin que éstos hayan recibido el producto.
De esta manera la FTC (Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos) y siete estados fiscales más han sentenciado a Google como la causante del engaño de unos anuncios que reflejaban a personalidades reconocidas elogiando el teléfono durante los años 2019 y 2020.
Influencers publicitaban por emisoras de radio las bondades y características del smartphone de Google sin haberlo probado
GOOGLE, EN UN APRIETO
El sector tecnológico convive en la carrera de ser el mejor fabricante. En este caso, compañías reconocidas en España como Xiaomi han puesto en marcha campañas de marketing para vender sus productos. Por ejemplo, el fabricante pekinés ha utilizado a Thibaut Courtois, futbolista del Real Madrid, como protagonista de su último spot publicitario para anunciar el nuevo Xiaomi 12T Pro, bajo el lema ‘Momentos a otro nivel’.
En este escenario, Google contrató a la agencia de publicidad iHeartMedia para poner en marcha una serie de promociones para publicitar su Pixel 4. De esta forma, el gigante tecnológico pagó a influencers para hablar sobre las bondades del teléfono inteligente sin haber probado ninguna de sus características. Tanto a Google como a iHeartMedia deberán pagar la cifra de 9,4 millones de dólares a razón de una multa por llevar a cabo prácticas fraudulentas por anunciar productos que nunca se usaron.
La FTC prohibirá a Google que distribuya productos a ciertas entidades y deberá presentar sus contratos ante la Comisión norteamericana
En total, se llevaron a cabo más de 29.000 patrocinios que incluían diálogos totalmente engañosos. «Es la cámara de mi teléfono favorita, especialmente con poca luz, gracias al modo de vista nocturna», «He estado tomando fotos de estudio de todo» o «También es excelente para ayudarme a hacer cosas, gracias al nuevo Asistente de Google activado por voz que puede manejar varias tareas a la vez» son algunas de las citas más polémicas que se difundieron a pesar de no haber testeado ningún smartphone. En concreto, los influencers hablaban de las mejoras que ofrece móvil sin llegar a mostrarlo.
EL CASTIGO A GOOGLE
La FTC norteamericana tiene suficientes «motivos para creer» que se ha violado o se está violando la ley debido a la conducta ilegal que ha puesto en marcha Google. Por consiguiente, la Comisión tiene en mente imponer otros castigos tanto a la empresa subsidiaria de Alphabet como a la agencia de marketing iHeartMedia, como prohibir que distribuyan productos a ciertas personas o entidades, así como presentar sus informes o contratos ante la Comisión y mantengan registros para permitir que la FTC garantice el cumplimiento.
Es de sentido común que la gente le dé más importancia a las experiencias de primera mano. Los consumidores esperan que los anuncios de radio sean veraces y transparentes sobre los productos, no engañosos con patrocinios falsos», dijo la fiscal general de Massachusetts, Maura Healey. «El acuerdo de hoy responsabiliza a Google e iHeart por esta campaña publicitaria engañosa y garantiza el cumplimiento de las leyes estatales y federales en el futuro».
Cabe destacar que todas estas promociones se difundieron a través las estaciones de radio de compañía de comunicación y publicidad iHeartMedia, con sede en San Antonio, Texas. iHeartMedia es el propietario de estaciones de radio más grande del país, con más de 850 estaciones de radio AM y FM y una red de radio por Internet que en conjunto llegan a más de 245 millones de oyentes cada mes.
TIEMPO PARA RECURRIR
Ahora, Google se encuentra en plazo para resolver este aprieto. La tecnológica debe recurrir la multa presentando acciones legales para poder evitarla. Sin embargo, los estados de Arizona, California, Feorgia, Illinois, Massachusetts, Nueva York y Texas también pondrán sobre la mesa sus alegatos para llevar a Google a los tribunales y requerir que pague los 9,4 millones de dólares.