Cellnex pagó dividendo este jueves por importe de 0,03518 euros por título, el cual es con cargo a primas de emisión, por lo tanto, no incurre en retención por parte de Hacienda ni se considera con cargo a resultados. Para ser más claros, este tipo de dividendos no salen de la evolución del negocio como tal, sino de las reservas que la compañía ha realizado al momento de realizar emisión de acciones y contemplar la prima de emisión, es decir, un sobre precio por encima del valor nominal y eso es lo que están devolviendo.
No obstante, desde el interior de Cellnex se ha hablado de la posibilidad de contemplar el pago real de dividendo a sus accionistas tan pronto como se obtenga el grado de inversión. De momento, el Standard and Poor’s mantiene la calificación de rating BB+ correspondiente al más alto sin grado de inversión, pero con perspectiva positiva. Por su parte, Fitch Ratings mantiene su perspectiva estable mientras que Moody’s, la castiga con calificación de bono especulativo, lo que en el argot de Wall Street significa basura.
Sin embargo, la calidad de contratos a largo plazo que Cellnex ha venido firmando y su fuerte generación de flujo de caja libre, pueden apoyar el crecimiento exponencial de la compañía especialmente crecimiento orgánico que, de lograr la calificación de grado de inversión, haría de Cellnex una empresa líder en cuanto a dividendo.
CELLNEX EN BOLSA
La estructura técnica de la acción de Cellnex nos permite identificar un patrón alcista el cual comenzó su curso a finales de octubre, si retomamos el anterior artículo publicado el 15 de noviembre, podemos notar el potencial alcista que las acciones tienen en más de un 60% de revalorización. Desde la semana pasada entidades como RBC y Citi, reafirmaron su posición de compra en las acciones de Cellnex con precio objetivo entre 43 y 45 euros, lo que significa cerca de un 30% de revalorización desde niveles actuales.
La semana pasada, el precio desarrolló el retroceso correspondiente que estamos esperando en áreas de compra en inmediaciones de 32,4 euros por acción, la única diferencia en este momento es que, el índice de fuerza relativa se encuentra cercano a niveles extremos de sobre compra, lo que podría indicar un posible retroceso más profundo.
Para poder cubrir la posición y aprovechar al mismo tiempo la oportunidad, vamos a ingresar de manera escalonada con un 30% de inversión en niveles actuales de manera tal que, ante un mayor retroceso, no vulnere el área de regularidad establecida en niveles de 29,7 euros.
Por otro lado, si el precio de la compañía respeta dicho nivel en confluencia con el índice de fuerza relativa en niveles de sobreventa, nos permitirá adherir un 30% adicional y el restante 40% lo vamos a adherir una vez el precio se ubique sobre las medias móviles exponenciales de 50 y 250 periodos con el fin de alcanzar los objetivos establecidos y más de un 60% de beneficio.