Las acciones de Indra suman cinco semanas consecutivas al alza con las que acumula más de un 24% de revalorización, dejando entrever una potencial continuación al alza. Como pudimos ver en días anteriores, los resultados financieros entregados por la compañía superaron las expectativas del mercado. Los ingresos de Indra crecieron un 14% acumulado de enero a septiembre frente al mismo periodo del año anterior y, a su vez, los ingresos trimestrales crecieron el 19,4% interanual. La compañía aduce que el tipo de cambio aportó 50 millones de euros en los 9 meses de este año, frente a los -41 millones de pérdidas que le representó en el mismo periodo del año anterior.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) ascendió a 282 millones de euros acumulado y de 108 millones en el tercer trimestre, lo que representa un crecimiento del 10 y 12,2% sucesivamente. Indra registró para los 9 meses de 2022 un EBIT reportado de 204 millones de euros, lo que representa un incremento del 19% interanual gracias a la mejora del margen operativo de sus divisiones T&D y Minsait. Es importante detallar que este resultado excluye la plusvalía por la venta de las instalaciones de San Fernando de Henares.
CRECIMIENTO EN VARIAS ÁREAS
Por su parte. el flujo de caja libre de Indra en los 3 primeros meses del año alcanzó los 54 millones de euros, más de 10 veces frente a los 5 millones registrados en el mismo periodo del año anterior, lo que repercute de manera positiva en él ratio de Deuda Neta/Ebitda, pasando de 1,7x en septiembre de 2021 a 0,6x para septiembre de 2022.
Otro de los aspectos importantes a detallar hace referencia a la contratación neta a cierre de septiembre de 2022, la cual alcanzó 3.130 millones correspondiente a un incremento del 21% reportado frente a los 2.588 millones del mismo periodo del año anterior. Este dato es importante, ya que le permitió a la compañía reiterar los objetivos anuales a cierre de 2022 los cuales inclusive, aumentaron con la entrega de los resultados semestrales teniendo en cuenta el difícil contexto macroeconómico por el que atraviesa el mundo.
La división de Transporte y Defensa obtuvo nuevos contratos en el segmento de tráfico aéreo con Enaire en España y Avinor en Noruega, así como contratos adicionales en Perú y Alemania. La subdivisión de Minsait le dio un impulso del 23% en moneda local, destacando administraciones públicas y sanidad, principalmente por el proyecto de elecciones en Angola.
INDRA EN BOLSA
Las cifras de la compañía suelen mantenerse sólidas, razón por la cual desde octubre del año pasado venimos realizando compras en niveles promedio de 8,7 euros por acción. Sin embargo, a mediados de junio vimos un retroceso importante que llevó al precio a buscar regularidad del último ciclo llevándose a su paso los soportes macro y la última directriz alcista que se venía gestando desde octubre de 2020. En este momento, la acción ha recuperado dicho nivel de soporte ubicándose sobre las medias móviles exponenciales de 50 y de 250 periodos lo cual prevé un potencial movimiento a su máximo más cercano registrado en junio de este año sobre los 11 euros e inclusive, hasta el primer objetivo seteado anteriormente arriba de 11,4 euros, lo que corresponde a más de un 21% de revalorización estimada al corto y mediano plazo.
Es importante que el precio se mantenga sobre las medias móviles y que realice la ruptura sólida de la directriz bajista de marco mensual, lo cual podría llevar el precio incluso al segundo objetivo registrado a finales de 2017 sobre 13,8 euros.
Especial cuidado en la ubicación del índice de fuerza relativa cercano a niveles de sobrecompra lo que podría presionar la acción de Indra la cual no podría superar a la baja los 7,2 euros, situación que, de llegarse a dar, reflejaría el rompimiento del área de regularidad y una nueva secuencia con caídas riesgosas.