jueves, 12 diciembre 2024

El fútbol europeo y español dan otro portazo más a la Superliga

Hace unas semanas, A22, la sociedad propietaria de la Superliga creada por Florentino Pérez, nombraba CEO a Bernd Reichart, con el objetivo de relanzar una competición herida de muerte, quien en las últimas semanas ha declarado su intención de sentarse con la UEFA para trasladarle su nuevo modelo de competición.

Tras el encuentro celebrado esta mañana en Nyon entre todos los actores del fútbol europeo y Reichart, la UEFA ha emitido en un comunicado en el que señala que “en consonancia con la unidad del fútbol europeo, la UEFA y las partes interesadas del fútbol participantes en la misma se ha vuelto a rechazar unánimemente la lógica que sustenta proyectos como la Superliga”.

En el comunicado, tanto la UEFA como directivos de ligas y clubes, entre ellos, Javier Tebas, presidente de LaLiga, y Miguel Ángel Gil Marín, CEO del Atlético de Madrid, y representantes de jugadores y de aficionados de todo el continente, también han mostrado su sorpresa ante el comentario de Reichart en dicha reunión de que “A22 Sports no está en calidad de representación de ningún club, incluidos los tres clubes que siguen apoyando abiertamente el proyecto”.

Además, todas esas partes han aprovechado para realzar su compromiso con “los fundamentos del fútbol europeo, que se basan en la apertura, la solidaridad y la meritocracia, y sirven a unos objetivos más amplios, que van desde los principios deportivos hasta el interés social, en lugar de privilegios”. Un enfoque que, como ha remarcado ese comunicado, ha recibido, entre otros, “el apoyo unánime de la Comisión Europea, el Parlamento Europeo, la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa y un amplio apoyo entre los gobiernos nacionales”.

Y es que, en España, ya desde hace unas semanas, el resto de los clubes, excluyendo al Real Madrid y Barça, se han ido posicionando en contra de esta nueva reinvención de la Superliga, tal y como recoge hoy ‘AS’. Entre ellos, Mao Ye Wu, consejero del Espanyol, que ha señalado que la Superliga “perjudicaría gravemente los intereses generales del fútbol y de la gran mayoría de clubes. Por ejemplo, en nuestro caso, el Espanyol es uno de los clubes fundadores de LaLiga pero eso no nos otorga ni debe hacerlo ningún blindaje en la competición. Ante el descenso que sufrimos hace 3 temporadas, solo valía ganarnos en el campo el retornar a la máxima categoría. Es la esencia del fútbol y de la competición. La Superliga ya fracasó una vez y acabará nuevamente en fracaso. Es un proyecto elitista y egoísta”.

En la misma línea que el directivo del equipo catalán se ha pronunciado en los últimos días David Espinar, consejero y director de presidencia del Valladolid, que ha dicho que aún con todas las novedades en el diseño de la Superliga “no justifican en absoluto la necesidad de crear una nueva competición elitista y separada del resto del ordenamiento competitivo actual”.

Por su parte, Ángel Haro, presidente del Betis, ha recalcado que “todas las competiciones son mejorables, pero esa mejora no se consigue cerrándolas a la meritocracia. Con este modelo, pasaríamos de un fútbol de los aficionados a un fútbol de los despachos”. Algo con lo que ha coincidido Fernando Roig, presidente del Villareal CF, que ha remarcado que “como el presidente más antiguo de LaLiga, siempre he pensado que lo más bonito que tiene el fútbol era poder soñar con conseguir objetivos importantes. Que haya una imposición determinada y que no se tengan en cuenta los méritos deportivos, es ir contra la propia esencia del deporte y, en definitiva, al fracaso absoluto. Estamos absolutamente en contra de la creación de la Superliga”.

Javier Solís, director corporativo del Valencia, también se ha mostrado tajante ante los medios hablando sobre la Superliga. La posición del club ché es que el fútbol “debe seguir evolucionando, buscar nuevas vías de ingresos y adaptarse a nuevas formas de consumo, pero la Superliga no es la solución para el fútbol. Los clubes detrás de este formato han contribuido en mayor medida a generar una situación de inflación en la industria y lo plantean como una solución económica para ellos mismos, pero a costa del empobrecimiento de los demás”.

El artículo de ‘AS’ también se ha hecho eco del intento de la Superliga de establecer una vía de “diálogo” con la competición española con el fin de acercar posturas. Algo para lo que LaLiga no está muy dispuesta, puesto que este fin de semana ha lanzado la campaña ‘Gánatelo en el campo’, con la que tratan de desmontar argumentos que utiliza la Superliga en contra del campeonato doméstico. Entre ellos, la idea de que los jóvenes cada vez tienen menos interés por el deporte rey en España, algo que, según datos de LaLiga, es mentira: la audiencia de LaLiga en España entre menores de 24 años se ha incrementado más de un 22% en las últimas 4 temporadas.


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