Estamos en plena época de comer huesos de santo. Se trata del típico dulce que se suele comer en el Día de Todos los Santos, la fecha en la que se suele honrar la memoria de todas las personas cercanas que ya han fallecido. Se trata de un postre que gusta sobre todo a los amantes de las cosas muy dulces y que la mayoría de las pastelerías de nuestro país venden por estas fechas. Pero, ¿sabías que no es necesario que los compres para disfrutar de ellos? No, porque puedes prepararlos tú mismo en tu propia casa con la receta que te vamos a explicar a lo largo de este artículo.
1Las propiedades de la almendra
Antes de pasar a contarte paso a paso lo que tienes que hacer para preparar esta deliciosa receta de huesos de santo que quedan más ricos que los que venden en cualquier pastelería, creemos que es un buen momento para poner en valor al verdadero protagonista de este plato: la almendra. Y queremos hacerlo, además de porque tiene un sabor muy especial y que se puede comer tanto a modo de snack como de ingrediente en cualquier receta, por la gran cantidad de propiedades que tiene. Así, por ejemplo, piensa que es una gran fuente de proteínas. Pero, además, aportan mucha energía. Por último, apuntar que tiene muchas grasas saludables, calcio y que, encima, son antioxidantes.