La industria eólica europea ha advertido de que los planes energéticos de la UE para responder a la actual crisis por el alza de los precios de la energía podrían poner en riesgo muchas inversiones en renovables y dirigirlas de Europa a Estados Unidos. En un comunicado, WindEurope, la patronal europea de la que forman parte grupos como Iberdrola, Acciona, Repsol, Enel, EDP, EDF, Engie, Equinor o Siemens Gamesa, entre otros, pone así en aviso sobre el paquete de regulaciones de emergencia abordado este viernes por los ministros de Energía de la UE, que contempla establecer una tasa de ‘solidaridad’ a las intermediarias de combustibles fósiles, como petroleras, o redistribuir a los más vulnerables los beneficios extraordinarios de las tecnologías inframarginales que vendan la electricidad por encima de 180 euros por megavatio hora (MWh).
Así, WindEurope consideró que lo que se decida hoy «podría agravar la crisis energética», ya que Europa necesita «grandes inversiones» en energías renovables de producción propia. «Todo el mundo está de acuerdo en eso, y en que es la vía para salir de la crisis. Pero tal y como está, el reglamento de urgencia dejará en suspenso muchas inversiones en energías renovables», afirmó la patronal europea eólica.
En este sentido, señaló que, en un principio, el reglamento pretende poner un tope a toda la generación de energía inframarginal en toda la UE, aunque, tal y como está previsto, «no impide que los gobiernos nacionales adopten impuestos adicionales y tomen medidas descoordinadas sobre los distintos tipos de generación de energía».
NUEVOS IMPUESTOS NACIONALES QUE SE SUMARÍAN A LAS MEDIDAS DE LA UE
Así, advirtió de que algunos gobiernos nacionales ya están planeando nuevos impuestos que se sumarían a las medidas de emergencia de la UE, medidas adicionales que incluyen «impuestos sobre los ingresos totales de los productores de electricidad, en lugar de sus beneficios», lo que estimó que «detendrá las inversiones en energías renovables».
Por ello, la patronal europea eólica, que indicó que los gobiernos tienen que actuar «para ayudar a las familias y las empresas a pagar las facturas de la energía», aseguró que, en este caso, «los inversores se irán a otra parte». «A Estados Unidos, por ejemplo, donde la Ley de Reducción de la Inflación prevé grandes créditos fiscales para las inversiones en energías renovables», dijo. «El mensaje a los gobiernos nacionales es sencillo: desviarse del límite máximo de la UE o aplicar impuestos adicionales a los productores de electricidad frenará las inversiones en renovables. Y hará mucho más difícil que Europa salga de la crisis energética», concluyó.