La líder de Podemos, Ione Belarra, ha expresado su «preocupación» por la situación de las negociaciones con el PSOE para los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año que viene, al alertar de que se encuentran «muy atascadas», además de urgir de nuevo a los socialistas a acceder a topar la subida de las hipotecas de tipo variable.
De esta forma y durante su intervención en el Consejo Ciudadano estatal de Podemos, ha reclamado a su socio de gobierno que pisen conjuntamente el «acelerador» para avanzar con «valentía» en una futuras cuentas públicas ambiciosas, porque es «hora de gobernar sin miedos y sin pedir permiso a los que mandan sin presentarse a las elecciones.
También ha avanzado que, aprovechando esta negociación, recuperarán de nuevo su propuesta de «congelar» el precio de los alquileres de forma análoga a la iniciativa desplegada en Escocia, ahora que han vuelto a «desbocarse», y ha vuelto a demandar que se incluya en el próximo plan de contingencia un tope a la subida de las hipotecas variables.
Y es que el país, según ha relatado, no puede arriesgarse a volver a tener «desahucios masivos» y que no «valen excusas» para no desplegar la medida, en clara referencia a las reticencias expresadas por el PSOE.
Ayer, la formación morada elevó su presión al registrar una proposición de ley para limitar la subida de las hipotecas de tipo variables, que plantea fijar durante un año un incremento del 0,1% para el caso de las familias vulnerables y, así, reducir la cuota mensual de los créditos en hasta 150 euros. Además, la propia Belarra ha lamentado de nuevo las «excusas» del PSOE a estas propuestas que su socio, como han expresado varios cargos, rechazan al no verla posible.
PROHIBIR EL REPARTO DE DIVIDENDOS CON LOS BENEFICIOS EXTRAORDINARIOS
Pero además, ha demandado avanzar en una reforma fiscal ambiciosa e incorporar impuestos adicionales al «oligopolio eléctrico», aparte de prohibir el reparto de dividendos y los beneficios extraordinarios para evitar así que estos «gigantes», en referencia a estas compañías, se «hagan de oro» con esta crisis.
La también ministra de Derechos Sociales ha demandado desbloquear de forma inmediata la ley de vivienda o la derogación de la ‘ley mordaza’. La gente no quiere, ni puede esperar más para que demos respuesta», ha trasladado para poner de manifiesto varias prioridades de Podemos de cara a la negociación, como extender los permisos de maternidad y paternidad a los seis meses, aplicar un abono transporte mensual de 10 euros al mes o elevar la inversión del Plan Corresponsables para atajar los problemas en materia de conciliación.
VIVIENDA Y GASTO MILITAR GENERAN TENSIÓN
Con el inicio de curso político, Podemos responsabiliza al PSOE de que la ley de vivienda aún no esté aprobada, al apreciar resistencias en su socio de coalición a aceptar propuestas en la normativa.
La ley de vivienda es un asunto que vuelve a generar fricciones en la coalición dado que los morados piden introducir una la regulación del precio del alquiler en zonas de mercado tensionado para todos los propietarios (grandes y pequeños tenedores de vivienda) y que la totalidad de las viviendas de la Sareb pasen a titularidad pública para aumentar el parque social en pisos de alquiler.
Desde el socio minoritario argumentan que estas cuestiones, planeadas vía enmienda, son imprescindibles para poder atraer a los socios del bloque de investidura, dado que el Ejecutivo por sí solo no tiene mayoría y sin esas mejoras el trámite parlamentario de la ley emanada del Consejo de Ministros no puede superarse.
Frente a ello, fuentes del ala socialista ya volcaron durante esta semana la responsabilidad de la tardanza de aprobar la ley a Podemos precisamente por dichas enmiendas, que no tienen sentido cuando ya habían llegado a un acuerdo en el seno del Ejecutivo.
El tema del gasto militar también está provocando fricciones, tal y como reconocen en el partido morado que insisten, al igual que todo el espacio confederal, en que no quieren una subida del presupuesto armamentístico bajo ninguna fórmula, aunque se trate de esconder mediante la vía de los programas especiales de armamento que no se incluyen en el tope de gasto.
Mientras, el PSOE confía en que elevar las partidas de Defensa no suponga un escollo y alega, frente a Podemos, que ese incremento al no computar en el límite de gasto no compite con las partidas dedicadas al gasto social.
PODEMOS SIEMPRE PROPONE LAS «MEJORES PROPUESTAS»
Así y con este contexto, Belarra ha admitido que la negociación sobre las futuras cuentas públicas no pasa por un buen momento y ha demandado a los socialistas que se avengan a sus posiciones y propicien cambios estructurales del país. «No queremos repetir más veces, porque el tiempo nos dé la razón que, esto o aquello, ya lo dijo Podemos hace meses», ha lanzado en clara referencia a su socio.
Es más, ha reivindicado que Podemos «siempre propone las mejores soluciones para la mayoría social» y que, en estas legislatura, muchas de ellas han acabado siendo incluso defendidas por la Comisión Europea. Sin embargo, ha lamentado que a menudo se han desplegado «perdiendo un tiempo precioso» que ya no es posible ante la tendencia alcista de los precios.
LA MEJOR FORMA DE ACABAR CON LA CRISIS ES LA PAZ EN UCRANIA
Finalmente, ha reiterado su exigencia de poner «toda la fuerza diplomática e institucional» para acabar con la guerra de Ucrania mediante un acuerdo de paz, pues este conflicto está generando la «ruina» para todos los pueblos de Europa y sobre todo el «sufrimiento» de los ucranianos.
Por tanto y por mucho que desplieguen medidas bien diseñadas, la única manera de terminar con esta crisis es la paz y que, tras siete meses de conflicto, queda claro que los beneficiados por esta guerra es la «industria armamentística», el «ultranacionalmo» del presidente ruso Vladimir Putin, y Estados Unidos al convertirse en el principal proveedor de gas licuado en el continente.
En consecuencia, ha rechazado que la ciudadanía de toda Europa deba sacrificarse por esta «invasión imperialista» de Rusia y ha alertado que Europa tiene «mucho que perder con esta escalada militar», que es «indefendible» desde una perspectiva «progresista».