La oreja guisada es un plato contundente y tradicional que se convierte en una alternativa estupenda cuando las temperaturas empiezan a bajar, y que sienta fenomenal acompañado de un vaso de vino tinto.
Hoy vamos a contarte cómo puedes elaborar esta receta al más puro estilo clásico y añadirle un toque diferente gracias a un ingrediente que hará que tu plato de oreja no pase desapercibido. ¡Toma buena nota!
7La importancia de remover

Hacer oreja guisada no es complicado, pero sí requiere un poco de atención por tu parte para que los ingredientes no se agarren al fondo de la cazuela, algo que es posible que suceda si te despistas.
Mantén el guiso a fuego lento durante unos 10 minutos y recuerda remover bien de vez en cuando para que la oreja no se quede pegada al fondo de la cazuela. Después de ese tiempo ya tienes tu plato listo.