Los planes de pensiones registraron una caída en las aportaciones en el primer semestre del año del 16%, con una diferencia de 185 millones respecto al año anterior debido a la limitación al ahorro impuesta a los planes de pensiones individuales tras la reducción del límite de aportación hasta los 1.500 euros. Así lo destacan los datos publicados este martes por la patronal Inverco, que ha incidido en que ese ahorro perdido no se ha trasladado a los planes de empleo.
Los planes de pensiones en su conjunto cerraron el primer semestre con una rentabilidad negativa del 6% a un año debido a la «elevada volatilidad persistente en los mercados financieros por las tensiones geopolíticas, inflacionistas y los temores a una recesión», que provocaron correcciones en los mercados bursátiles y de bonos.
La categoría de renta variable fue la más penalizada a este plazo, al registrar un descenso del 8,3%, seguida de los garantizados y los de renta fija mixta, que se dejaron el 7,2% y el 6,6%, respectivamente.
La patronal ha explicado en un comunicado que esos malos rendimientos registrados en el primer semestre provocaron un ligero cambio en las ponderaciones de la renta variable respecto al primer trimestre del año.
De esta forma, la mejor actuación de los mercados nacionales de acciones respecto de otras geografías ha provocado un incremento en el porcentaje de renta variable interior hasta el 14,8% desde el 13,9% a finales de marzo, en tanto que la renta variable exterior retrocedió hasta el 26,7% desde el 27,8% de marzo de 2022.
La rentabilidad del resto de plazos se mantuvo positiva: fue del 0,9% a tres años y del 1,3% a cinco, en tanto que más a largo plazo ascendió hasta el 3,1% a 26 años y hasta el 2,7% a 25 años. El volumen de activos se situó en 117.095 millones de euros, lo que supone un descenso de 6.573 millones de euros en el segundo trimestre del año y equivale a un 5,3% menos que a cierre de marzo.
Las aportaciones acumuladas para el conjunto de planes hasta el segundo trimestre del año alcanzaron los 1.493 millones de euros, mientras que las prestaciones han sido de 1.998 millones, con lo que las prestaciones netas ascendieron 505 millones de euros en el primer semestre. Las cuentas de partícipes se situaron a cierre de junio en las 9.375.240, si bien el número de partícipes estimado es de ocho millones, dado que algunos tienen más de un plan.
El patrimonio del sistema individual (tercer pilar) cerró junio en 81.123 millones, el 5,8% menos que en marzo, con 7.413.253 partícipes, al mismo tiempo que el de empleo (segundo pilar) cerró el semestre en 35.166 millones de euros, el 4,1% menos respecto al trimestre anterior con 1.909.611 cuentas. El sistema asociado acabó el sexto mes del año en 805 millones de euros, lo que supone un descenso del 6,1% con respecto a marzo, con 52.376 cuentas.