La venganza de Barroso y Contreras agrava la guerra entre Ferreras e Iglesias

La guerra entre Pablo Iglesias y Antonio García Ferreras ha tomado altos vuelos. El escándalo de los audios es evidente, pero a él se le añadido gasolina por parte de algunos mass media interesados en minar a Atresmedia.

Es el caso del Grupo Prisa, eterno conspirador progubernamental que ahora tiene como puntales ideológicos a Miguel Barroso y José Miguel Contreras, que al menos han tenido el detalle de acoger en el seno de El País y la Cadena SER a voces de la izquierda transformadora (de Ignacio Sánchez Cuenca  a Daniel Bernabé).

CERCO

Iglesias asegura que simplemente es «la gravedad de los audios» la que ha «roto el cerco» en muchos periódicos «de izquierdas», véase El País, que rara vez informa sobre temas que tienen vertientes mediáticas que afectan a competidores.

Lo cierto es que Prisa ha amplificado la batalla de la mano de monólogos como el de Àngels Barceló, que pateó a Ferreras: «La corrupción política en este país hubiera sido imposible sin la participación y la connivencia de otros actores más allá de determinados políticos. Sin el favor de algunos policías hubiera sido imposible, sin el favor de cierta clase empresarial tampoco, así como sin el favor de algunos jueces y sí, también, sin el favor de ciertos periodistas«.

«Hace ya mucho tiempo que nuestra profesión necesita una catarsis, nosotros también somos responsables del deterioro democrático de este país, no somos unos actores secundarios, tenemos un papel determinante en el relato de la historia. Es nuestra obligación ser fieles a la verdad, fiscalizar al poder, sea del color que sea, cuestionar, preguntar, es nuestra obligación ser incómodos», añadió sin reparar en que su compañera Ana Terradillos publicó el infecto y cloaquil Informe PISA que tanto dañó a Podemos.

VETO TELEVISIVO

Iglesias está empujando para que Yolanda Díaz no regrese a La Sexta a pesar de las dificultades que tendrá Sumar para lograr altavoces afines con cierta resonancia. El exvicepresidente asegura que es legítimo ir a Trece o Intereconomía, que tienen «una línea editorial de derechas o conservadora o confrontar ideas distintas o incluso interpretaciones distintas de los mismos hechos. Pero cuando hablamos ya de ‘fake news’ estamos hablando de otra cosa que debería ser delictivo, si no lo es».

«Una cosa es que uno vaya a una tertulia y haya unos señores muy de derechas e incluso sea uno de izquierdas contra ocho de derechas, que en esas me vi yo muchas veces. Otra cosa es que haya un señor en una tertulia, que sabiendo que una noticia es falsa, da esa noticia. Porque eso destroza el periodismo, destroza las reglas del juego», asegura.

OTROS RIVALES DE ATRESMEDIA APOYAN A IGLESIAS

El fundador de Podemos está recibiendo la comprensión de estrellas de Mediaset como Jorge Javier Vázquez, que escribe en Lecturas que «lo sucedido con Pablo Iglesias y los audios de Villarejo es de una gravedad extrema, pero son demasiados los que se están poniendo de perfil con el tema. Ha quedado demostrado que el sistema tiene la posibilidad de ahogarte utilizando las peores artes si lo que pretendes es, precisamente, atajar la corrupción y optar por la senda de la mayor decencia política posible».

El presentador de Telecinco dice sin que le falte razón que «bastante ha aguantado Pablo Iglesias. Lo que le han hecho es para volverse loco. Enfrentarse día tras día a noticias falsas con el fin de eliminarlo del tablero político. E Irene Montero, lo mismo».

Y añade: «Según va pasando el tiempo, veo más necesaria la presencia de Podemos en política. A mí, que durante toda mi vida he pecado de ingenuo, me han enseñado que nuestra España necesita una revisión urgente para no ser un país gobernado por los cinco de siempre que impiden que sea más justo, más moderno y, sobre todo, menos corrupto. Por no hablar del cachondeo en el que se está convirtiendo cierta parte de la justicia, más atenta a servir a criterios partidistas que a dedicarse a hacer su trabajo de la manera más honesta posible».