Mientras el Ejecutivo se reúne hoy con las empresas energéticas para explicarles lo relativo al impuesto extraordinario, las patronales de las entidades financieras (AEB, CECA, UNACC) tendrán que seguir esperando su turno para recibir las aclaraciones pertinentes, según ha sabido MERCA2 en fuentes gubernamentales. Una de las cuestiones por aclarar tiene que ver con el concepto en el que gobierno piensa determinar qué entidades serán las que tengan que pasar por caja para abonar el recargo extraordinario previsto por el Gobierno. Sobre la ausencia de la cita de las patronales de banca, fuentes del Gobierno se limitan a señalar que «por ahora, no están previstas».
SIN EXPLICACIONES DEL GOBIERNO
No es la primera vez que pasa. El Gobierno se atora con la terminología y confunde a los ciudadanos, a los afectados y a los inversores. En este caso, la cuestión tiene que ver con cuál será el concepto en el que se basen para determinar el umbral a partir del cual las empresas, en este caso, las energéticas y las entidades financieras que pagarán un recargo extraordinario en 2023 y 2024.
BENEFICIOS Y GOBIERNO
Primero dijeron que serían en base a los beneficios y luego que sería en base a la facturación, lo cual obviamente no es lo mismo, siendo más perjudicial si se hace sobre bruto que sobre neto, explican a en el ámbito de los analistas. En este punto, según han señalado fuentes del Gobierno a MERCA2 lo que se está claro es que “se pondrá un umbral, ya sea la facturación o cualquier otra variable que garantice que el impuesto afecta a las grandes”.
De este modo, el mensaje del Ejecutivo es que son las grandes las que van a pagar, en el caso de las energéticas o la banca. Mientras quedan libres empresas como las aseguradoras. En este caso, el de las compañías de seguros, fuentes del Gobierno las aseguradoras se libran del hachazo que recibirán la banca y las energéticas porque “estas empresas no se benefician de la subida de tipos de interés”. Una cuestión con la que no están de acuerdo los analistas consultados por MERCA2.
La proposición de ley se presentará en las próximas semanas
En cuanto a los plazos, fuentes del Ejecutivo apuntan que es una cuestión que tendrá lugar en las próximas semanas y se presentará como proposición de ley (PPL) en el Congreso de los Diputados. Está por ver cuál será el recorrido que tenga, pero lo lógico es que el Gobierno la saque adelante con el apoyo de los grupos que permitieron a Sánchez sacar adelante la moción de censura que le permitió desalojar a Mariano Rajoy de la Moncloa y ser presidente del Gobierno.
Una de las cuestiones que está por ver es si las energéticas y las entidades financieras decidirán recurrir el impuesto extraordinario. Lo normal es que esperan a tener el texto definitivo para analizarlo y tomar una decisión.
PATRONAL DE ELÉCTRICAS
En este punto, antes de la reunión de la que informó el Gobierno, la patronal de las eléctricas (Aelec), señaló que Respecto al anuncio realizado ayer por el Gobierno sobre impuestos a las empresas energéticas, desde Aelec vamos a esperar a tener más información y detalles antes de realizar una valoración. Desde el verano pasado se han implementado numerosas medidas en el mercado eléctrico para reducir la factura. No solo no hay beneficios extraordinarios, pero además la crisis actual está reduciendo los resultados de las empresas eléctricas”.
el anuncio del nuevo impuesto temporal a la banca refleja «improvisación jurídica”, según la patronal de los bancos
Para la patronal de los bancos, la AEB, que preside Alejandra Kindelán, el anuncio del nuevo impuesto temporal a la banca, anunciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, refleja “la improvisación jurídica” en que opera “un sector tan importante para la economía y la sociedad”, en referencia al sector bancario, y ha indicado que “distorsiona el mercado”. Mientras, desde la patronal de las cajas y antiguas cajas, CECA, han apuntado que es una medida que “no contribuye a armonizar los regímenes fiscales” dentro de la Unión Bancaria, si bien ha señalado la necesidad de conocer los detalles de la medida “para poder hacer una valoración más informada”.
LOS ANALISTAS
Desde el ámbito de los analistas, en XTB, Darío García apunta que “los nuevos impuestos a los extraordinarios perjudicarán directamente a los inversores que ya reflejaron en el comportamiento de la sesión su descontento y preocupación de esta medida del gobierno. A pesar de que esta medida estima, porque es incierto, una recaudación que en conjunto apenas alcanza el 30% del importe estimado por el Gobierno que supone el incremento de los precios (el 10%)”, señala a MERCA2 el analista de XTB, Darío García. “Los extraordinarios, que comúnmente se refieren al exceso de provisiones y deterioros, se verán reducidos en gran medida por parte de las cotizadas para que el impacto de estas tasas se reduzca lo máximo posible, mientras los bancos lideran las correcciones con caídas superiores al 10% y que proyectan la ya preocupante expectativa de los inversores sobre la próxima situación económica”.
Si aumenta los impuestos a las empresas de servicios públicos, los beneficios de las compañías se verán impactados
“Si el Gobierno español aumenta los impuestos a las empresas de servicios públicos, los beneficios de las compañías se verán impactados. No obstante, en el caso de Iberdrola y Endesa, podemos esperar que el efecto sea más moderado dada su diversificación geográfica”, apunta Anne Grammatico, analista de Scope Ratings “Dicho esto, cualquier subida de impuestos y la falta de previsibilidad de la política fiscal del Gobierno español corren el riesgo de comprometer el calendario y el volumen de inversión de capital de las empresas, que es vital para la transición de España hacia un futuro con menos emisiones de carbono. Con menos beneficios retenidos por el impuesto, las empresas de servicios públicos podrían pedir más préstamos para seguir invirtiendo, lo que provocaría un deterioro de su nivel de apalancamiento”.
En el caso de la banca, «los resultados del primer trimestre de las entidades españolas fueron sólidos. No esperamos que los grandes grupos bancarios españoles cambien radicalmente sus previsiones a causa de este impuesto, aunque podrían estar justificados algunos ajustes», indicó la analista.