El vicepresidente y consejero coordinador de Indra, Alberto Terol, y la consejera independiente de Indra, Carmen Aquerreta, son familia; más en concreto, cuñados. Ella ha estado con cargos importantes en Andersen, en Boston Consulting Group y en Mitchell Madison Group con base en Madrid y como socia de Deloitte en varios países con especialidad muy especifica en intangibles y propiedad intelectual.
LA JUNTA
Los proxies que están trabajando para la inminente junta de general de accionistas de este próximo jueves, parecen que pueden contemplar supuestos conflictos entre consejeros, y están moviéndolo en distintos ámbitos para confirmar vinculaciones familiares, según fuentes solventes. En una noticia publicada en «La Información», este medio hace mención explicita a «otra». Apunta que es Carmen Aquerreta Ferraz, del entorno del propio Terol.
Fuentes informales de la SEPI consideran que Alberto Terol lideró la rebelión contra Marc Murtra, único sustituto para Fernando Abril Martorell en ese momento, desde posiciones totalmente ideológicas contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y forzó una estructura de gestión con dos consejeros delegados, Mataix y Ruiz, que ha fracasado en pocos meses. Ruiz salió hace varias semanas, y Mataix ha sido confirmado como consejero delegado único, replicando una estructura similar a los últimos tiempo de Javier Monzón. La realidad es que la acción estaba a 7€ a la llegada de Murtra y ahora ha llegado a las 11€ esta pasada semana, y los últimos resultados trimestrales han sido los mejores de la ultima década.
Terol, según Hispanidad, se esta «resistiendo a marcharse» como vicepresidente y consejero coordinador y, añade que es porque quiere «paralizar el gran proyecto español de Defensa”. Todo apunta a un enrocamiento del consejo a los planes del Gobierno por convertir a Indra en el líder de la nueva industria de defensa nacional. La SEPI ha intensificado su interés y su compromiso con la compañía en una acción de país e interés nacional para aprovechar y cumplir con el nuevo reto militar europeo, frente a la realidad de la guerra de Ucrania, según fuente informales de la planta noble de Indra.
POSICIÓN INCÓMODA
En este sentido, con la junta de accionistas en puertas, Ana de Pro, consejera de Indra desde 2020, no esta cómoda con el giro a Defensa de la multinacional española. En esta cita se prevé que se plantee la nueva hoja de ruta para Indra, un camino con la compañía como pilar principal de la industria de defensa nacional. Un reto para de Pro.