Los minoritarios de Lleida.net alientan un ‘Gamestop’ contra Ana Botín

Los minoritarios de Lleida.net se la tienen jurada a Banco Santander y a la SEPI, la sociedad pública dependiente del Ministerio de Economía, desde octubre de 2020. Aquel mes, tanto la SEPI como Banco Santander vendieron al mercado sus opciones de venta del 14% del capital social de la compañía, un hecho que hundió la cotización más de un 60% desde los máximos históricos y puso en riesgo numerosos ahorros de particulares, pero también de Sisco Sapena, consejero delegado y fundador de la cotizada.

Esta opción de venta ejercida por Banco Santander y la SEPI era el centro de una demanda puesta por Sapena contra la entidad financiera, que poseía las acciones a través de un fondo. En concreto, Santander y la SEPI debieron vender ese 14% a Sapena y a un precio de 1,7761 euros, tal y como ha establecido el Tribunal Supremo en una sentencia que quitaba la razón al CEO de Lleida.net.

La sentencia es firme y por tanto de obligado cumplimiento al no poder ser recurrida a otras instancias judiciales. Aún está por ver si Santander ejecutará dicha sentencia. Por el momento, no hay constancia ni por volumen de negociación ni por hechos relevantes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de que así sea. Pero debe cumplirla.

BANCO SANTANDER PECÓ DE IMPRUDENCIA EN PLENO PROCESO JUDICIAL

Nunca antes una resolución judicial firme había sido celebrada por el perdedor del caso. Y es que, si Banco Santander y la SEPI hubieran ejercido esta opción de venta en el momento que tocaba, en 2015, y a los precios estipulados de 1,7761 euros, Sisco Sapena hubiera pagado el doble de la cotización entonces de Lleida.net.

Sisco Sapena, fundador y CEO de Lleida.net
Sisco Sapena, fundador y CEO de Lleida.net

Sin embargo, con el esfuerzo y el trabajo de un equipo de apenas un centenar de personas, el precio de las acciones comenzó a tomar fuerza, cuerpo y solidez en el tiempo. En 2020, con el confinamiento, la firma conocida como ‘el notario de Internet‘ despuntó con una fuerza inusitada. Casi un 1000% de subida y en plena pugna judicial con Banco Santander, un gigante vencido por el propio éxito de una compañía del BME Growth.

Fue entonces y con unas abultadas pérdidas derivadas de la pandemia cuando el fondo gestionado por la entidad financiera de Ana Botín vio la posibilidad de presentar un mejor resultado a los inversores vendiendo las acciones de Lleida.net. Para los minoritarios, estas operaciones además de ilegales supusieron la pérdida de ahorros o beneficios futuros. La acción, de hecho, no ha vuelto aún a visitar esos niveles dejando atrapados a quienes confiaron en la empresa.

La orden es mantener las acciones y que sea el fondo quien tenga que pagar un alto precio para cumplir con la sentencia

Pero ahora los minoristas tienen la sartén por el mango, siempre y cuando Banco Santander cumpla con la sentencia judicial. «La orden es mantener las acciones y que sea el fondo quien tenga que pagar un alto precio para cumplir con la sentencia«, han asegurado algunos minoritarios de Lleida.net a preguntas de MERCA2.

EL VARAPALO DE GAMESTOP PUEDE REPETIRSE EN BANCO SANTANDER

«Sí, Banco Santander tendrá que cumplir con la sentencia. Es firme», han concretado. «Haremos como hicieron los particulares para echar a los bajistas de ‘Gamestop'», han destacado.

La estrategia de los minoristas en Gamestop fue uno de los casos más sonados de los últimos años. La compañía fue asediada por los bajistas, y las posiciones eran elevadas. En un foro de Reditt, cientos de particulares comenzaron a comprar en masa acciones de esta compañía, haciendo perder miles de millones a los hedge funds. La estrategia lógica sobre una empresa dedicada a la venta de videojuegos y merchandising en pleno auge de los juegos en línea era posicionarse a la baja. De hecho, los resultados de la compañía afianzaba aún más a los fondos oportunistas.

LOS MINORISTAS DE LLEIDA.NET DISPARAN EL VOLUMEN

Para ganar dinero en esta estrategia es necesario alquilar acciones a sus propietarios, venderlas en el mercado con la esperanza de que bajen de precio, recomprarlas después y devolverlas a su dueño. La diferencia entre el precio de venta y compra es el beneficio para estos fondos. El riesgo de esta operación se encuentra en la tendencia de los precios. Si ésta en vez de bajar cambia y gira al aza los fondos pierden el dinero porque tienen que devolver las acciones tras comprarlas a un precio superior.

La estrategia de algunos minoristas de Lleida.net consiste en hacer pagar más caro al Banco Santander. El cómo es sencillo. Evitan vender las acciones, las mantienen en la cartera y secan el mercado al no facilitar títulos. De esta forma, tan sólo la fuerza de la demanda incrementará los precios. Sólo en la jornada de ayer, los precios se dispararon un 31% y en la jornada de este martes, las alzas prosiguen con subidas del 6% y fuertes volúmenes de negociación.

El volumen total ha alcanzado los 395.449 títulos, poco más del 10% del total que tienen que recomprar la SEPI y el Banco Santander para satisfacer la sentencia del Supremo. En la jornada de este lunes, el volumen de negociación alcanzó los 652.370 títulos, 41 veces superior al de la sesión del viernes.

TAN SÓLO ENISA MANTUVO LA OPCIÓN DE VENTA DE LLEIDA.NET

De esta forma, si todas las compras las hubiera realizado Banco Santander tendría en este momento casi 1,05 millones de acciones. Aún tendría que comprar otros 2,35 millones de títulos para cumplir la sentencia y cada día que pasa el valor de las acciones sube, si la estrategia seguida por estos accionistas es correcta.

Por el momento, las acciones de Lleida.net se han disparado casi un 37% desde el cierre del pasado viernes; recuperan un 14% desde el inicio del año, volviendo así al terreno positivo y a niveles no vistos desde noviembre de 2021. Según los últimos hechos relevantes, tan sólo la Empresa Nacional de Innovación SME ostenta ese 7,08%, una actuación prudente y que no le supondría nada más que no ganar 2,5 veces más, pero no perder ni un euro ya que en el momento de la salida a Bolsa de Lleida.net, el valor de cada uno de los títulos se situó en 1,18 euros.

Si Banco Santander hubiera ejercido la venta por aquel entonces, sí hubiera sido un duro golpe para Sapena, pero superando este umbral nunca antes una sentencia contraria le había dado este descanso.