Inmobiliaria Colonial y su filial francesa Société Foncière Lyonnaise (SFL), oficializaron la conversión de todos los bonos en circulación del grupo en bonos verdes, el importe total de la operación corresponde a 4.602 millones de euros. De esta forma, Inmobiliaria Colonial se convirtió en la primera compañía del selectivo Ibex 35 en tener la totalidad de sus bonos calificados como verdes, lo que significa obtener recursos a través de bonos para financiar activos que generan un impacto positivo al medio ambiente, actividad que hace parte de su estrategia de negocio.
La compañía ha tenido un inicio de año bastante crudo ya que desde el primer día comenzó a profundizar la devaluación de su acción que traía desde agosto del año pasado. La acción ha alcanzado a perder el -12,5% hasta su nivel mínimo de 2022 visitando los 7,2 euros por acción.
Sin embargo, no todo es malo. Si revisamos en detalle la estructura del gráfico de marco semanal, podemos obtener una medición controlada de las caídas desde los mínimos creados por la pandemia y profundizados en octubre de 2020 hasta los máximos de 2021, la cual muestra un retroceso a modo de descanso del precio en el pulso del mercado en inmediaciones de los 7,22 euros que corresponde al 61,8 de retroceso de Fibonacci. Situación que contrario al pánico del mercado, presenta oportunidad de inversión.
Entre junio y agosto del año pasado, el precio desarrolló un movimiento de ciclo que automáticamente se convierte en un imán de precio objetivo posterior al detrimento de la acción. Por lo tanto, el hecho de que el precio haya llegado a este nivel de pulso que confluye al mismo tiempo con un soporte de septiembre de 2020, indica la probabilidad de punto de giro al alza en busca del objetivo justamente en el 61,8 de retroceso de Fibonacci de la medición del ciclo que comentamos anteriormente. Este nivel se ubica en 8,87 euros, lo que corresponde a más de un 20% de beneficio para el corto y mediano plazo.
Notemos que el índice de fuerza relativa se encuentra en niveles de sobreventa. Sin embargo, tiene la posibilidad de generar un movimiento de presión extremo a la baja que en el gráfico estaría representado en la formación de un truco tal cual se dibuja. Una vez realice ese movimiento y respete dicha área, se entenderá como la confirmación del camino alcista. Al mismo tiempo ubicamos un segundo objetivo en los 11,14 euros que corresponden a la resistencia macro mensual y evidentemente, a los precios de la acción previos a la pandemia.