WiZink ampliará capital en 250 millones a través de una inversión respaldada por Värde Partners y otros inversores internacionales, dirigida a gestionar el impacto potencial de las reclamaciones por tarjetas revolving y reforzar la implementación de su plan estratégico, enfocado en convertirse en el banco digital líder en financiación al consumo de la Península Ibérica, según ha informado este jueves.
«Con este incremento de capital se quiere fortalecer significativamente la posición financiera de WiZink, lo que le permitirá reforzar la ejecución de su plan de negocio, que incluye aprovechar las oportunidades de crecimiento que pudieran aparecer en el mercado, y gestionar el potencial impacto de los litigios por las tarjetas de pago aplazado», ha comunicado WiZink.
Asimismo, el banco ha señalado que la inyección de capital le permitirá acometer «nuevos proyectos corporativos e inversiones» para seguir creciendo y completar la diversificación de negocios, que inició el pasado año con el lanzamiento de su nueva línea de préstamos personales, la entrada en el negocio de financiación de automóviles con la adquisición de Lendrock o el lanzamiento de su nueva gama de tarjetas de crédito segmentadas por perfil de cliente.
Para la ampliación de capital, Mulhacen, accionista indirecto del banco, ha alcanzado un acuerdo con Värde Partners y los principales tenedores internacionales de su bono, que han apoyado, entre otros aspectos, alinear el vencimiento del bono con los plazos del plan de negocio del banco.
Mulhacen es el vehículo de inversión en Singapur a través del cual Värde Partners adquirió el 49% del accionariado del banco digital, que entonces estaba en manos de Banco Santander, y con el que se convirtió en el único accionista de WiZink.
Mulhacen emitirá un nuevo vehículo, financiado al 50% por Värde y al 50% por los actuales tenedores de bonos, para financiar la ampliación de capital de WiZink. La capitalización parcial del actual bono de Mulhacen se redenominará a un valor del 55% de su principal actual y extenderá su vencimiento a 2026.
Así, Värde Partners permanecerá como accionista mayoritario de Mulhacen con una participación del 60%, mientras que el 40% restante estará en manos de los tenedores de los bonos.
RESPALDO DE LOS INVERSORES AL EQUIPO DIRECTIVO
La transacción no implica cambios en la gestión de WiZink ni en su consejo de administración, que cuenta con un peso mayoritario de consejeros independientes.
El consejero delegado de WiZink, Miguel Ángel Rodríguez Sola, ha asegurado que la ampliación de capital pone de manifiesto el apoyo de Värde Partners y de los inversores internacionales a la estrategia de crecimiento del banco digital.
Esta operación nos permite reforzar la implementación de nuestro plan estratégico para liderar el mercado de financiación al consumo digital en la Península Ibérica y continuar mejorando la propuesta de valor que ofrecemos a nuestros clientes», ha valorado el directivo.