Próximo a terminar el año, Grifols presenta una desvalorización de hasta un -37,8% acentuando su caída desde Julio. Precisamente, el 17 de julio explicábamos las razones técnicas y los probables movimientos solo de dirección bajista en busca de niveles cercanos a los 15,7 euros por acción que finalmente se cumplieron a inicios de diciembre.
Aunque fundamentalmente Grifols viene trabajando en contra de su alto nivel de apalancamiento con lo cual disminuye la capacidad de flujo de efectivo y que atada a una deficiencia en la recolección de plasma por culpa de las restricciones creadas para hacer frente a la pandemia e inclusive, por sus decisiones frente a la adquisición de Biotest, desde el punto de vista técnico, la acción de Grifols tenía una muy alta probabilidad de buscar la regularidad del mercado que se presenta siempre que un activo financiero ha desarrollado un claro avance al alza como sucedió con la acción de Grifols, la cual desde enero de 2010 hasta los máximos históricos en febrero de 2020 previo a la pandemia, la acción se revalorizó cerca del 746%.
Por lo tanto, los inversionistas aprovechan para tomar beneficio y al mismo tiempo ejercen presión a la baja para llevar el precio al área de regularidad que confluye principalmente con el nivel 61,8 de retroceso de Fibonacci.
Actualmente, el precio de la acción de Grifols ha visitado dicho nivel en inmediaciones de los 15,5 euros por acción realizando a su vez lo que conocemos como una cobertura la cual es un quiebre de dicho nivel, pero con un movimiento automático de retroceso encaminándose con dirección alcista, lo que refleja la estructura de la vela de gráfico mensual que conocemos como pin bar alcista.
Estamos prácticamente a cuatro días de cierre de año, de manera tal que, si el precio cierra con la vela de formación pin bar, evidentemente por encima del área regularidad, es decir, por encima de los 15 o 16 euros por acción, confirmaría ese movimiento al alza en busca de un primer objetivo en niveles de 23,9 euros que corresponden al área de regularidad del cierre de ciclo anterior que confluye con el nivel inferior del canal alcista macro que el precio había desarrollado anteriormente.
Posteriormente buscaremos un segundo objetivo precisamente en los máximos históricos arriba de los 34 euros por acción. Esto significa operación de compra con una rentabilidad cercana al 44% para el primer objetivo y más del 100% para el segundo objetivo, teniendo en cuenta que se prevé para el largo plazo o por lo menos con desarrollo estructural para 2022.