La gestora estadounidense está aprovechando el miedo en los mercados por la variante ómicron del Covid-19 para pescar en aguas bajistas. Sus dos últimas víctimas en España han sido el holding de aerolíneas IAG y Telefónica, sobre las que ha aflorado posiciones en corto durante los últimos días. De esta manera, BlackRock, que el 2 de diciembre ya había aparecido en el capital social de la teleco con una posición bajista del 0,56%, el pasado martes aumentó la apuesta hasta el 0,62%, tal y como figura en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
La firma norteamericana ha realizado estos movimientos a través de BlackRock Investment Management (UK) Limited, después de varios días en los que Telefónica no termina de salir de la tendencia bajista en la que se ha instalado en el mes de diciembre. El castigo que han sufrido las bolsas por el temor a posibles restricciones a causa de la nueva variante del coronavirus, así como la nueva ampliación de capital que va a realizar la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete para abonar el dividendo, la sitúan por debajo de los 3,7 euros. Desde el «viernes negro» para los mercados por la aparición de ómicron (26 de noviembre), la teleco se deja un 4,7% en el selectivo español.
Sin embargo, el movimiento de BlackRock contrasta con la relevancia de la propia gestora en el accionariado de Telefónica, pues es el tercer accionista de la operadora española con un 4,52% del capital. Por delante solo tiene a BBVA, con un 4,94%, y Caixabank, con un 4,70%. Además, la firma estadounidense tiene también otras posiciones las filiales de Telefónica en Brasil y Alemania.
MÁS PRESIÓN PARA IAG
En cuanto a IAG, la compañía está siendo una de las más castigadas por ómicron. Desde la aparición de esta variante se ha dejado más de un 11% y sus títulos cotizan a 1,6 euros, por debajo de los 1,8 en los que se situaba días previos a que se conociera esta coyuntura global en los mercados. El conglomerado formado por Iberia y British Airways es el que peor castigo ha obtenido desde entonces entre las compañías europeas que forman parte del sector como Lufthansa (-1,9%), Ryanair (-6,1%) o Airfrance (-6,4%).
Desde luego la aerolínea no está teniendo el año deseado por situación tan cambiante para la movilidad y el turismo que provoca el coronavirus. De hecho, desde enero los títulos de la empresa pierden un 9,6%. Un contexto difícil en el que los ‘hedge founds’ no han dejado de presionar a la compañía que dirige Luis Gallego durante todo el año, apostando a que sus acciones seguirían cayendo.
En este sentido, el fondo Citadel ha sido uno de los bajistas que más ha presionado a IAG con posiciones en corto que ha ido aflojando en las últimas semanas. Sin embargo, aprovechando el temor en los mercados a nuevas restricciones, BlackRock ha cogido el relevo del fondo de cobertura dirigido por David E. Shaw y ha entrado en IAG con una posición en corto del 0,51%, notificada a la CNMV el pasado martes 7 de diciembre.