El Corte Inglés ha encargado a JLL, firma de consultoría y servicios especializados en el sector inmobiliario, la comercialización en alquiler de su «innovador» proyecto de oficinas que estará ubicado en el Paseo de la Castellana 69 (Madrid) y que será el último inmueble de nueva planta que se construirá en la zona CBD (Central Business District) de la capital.
El edificio responderá a los nuevos desafíos constructivos, con un gran avance en arquitectura y sostenibilidad, al tiempo que estará muy vinculado a la sociedad a través del cumplimiento de los criterios ESG (Ambiental, Social y de Buen Gobierno, por sus siglas en inglés), según ha destacado el grupo de distribución.
El edificio, que estará situado junto a El Corte Inglés de Castellana, el flagship de la compañía, tendrá 16.000 metros cuadrados repartidos en cinco niveles. Todos los espacios de oficinas tendrán acceso a terrazas exteriores. Además, el activo contará con una cubierta ajardinada de 3.000 metros cuadrados y dos plantas en el sótano, que suman 300 plazas de aparcamiento.
En el centro del mismo se situará un atrio con áreas verdes, un oasis urbano en el corazón de Madrid que favorecerá la entrada de luz natural para contribuir a la salud y el bienestar de las personas y, al mismo tiempo, propiciar el ahorro de energía, según ha resaltado la firma presidida por Marta Álvarez.
Las oficinas contarán con salas de reuniones, auditorio, espacio para eventos; tecnología y sistemas de última generación, así como configuraciones versátiles que favorecen la interacción de los empleados y facilitan la creación de un modelo Club orientado a la flexibilidad en su día a día. Los espacios diáfanos del edificio posibilitan adaptar la configuración a las necesidades de cada inquilino.
Los pilares del proyecto son la sostenibilidad, la eficiencia y el diseño arquitectónico para proporcionar una experiencia ‘premium’ y alinearse con los criterios ESG.
El edificio contará con elementos que permitan contribuir a los objetivos de desarrollo sostenible y avanzar en la reducción del impacto medioambiental, a través del uso de materiales con baja emisión de carbono, un diseño de consumo circular y resiliente, o la instalación de fuentes de energía renovables. Además, optará a las máximas certificaciones en materia de sostenibilidad, entre ellas la Net Zero Carbon.
Para la definición del producto inmobiliario, JLL desarrolló una primera fase de consultoría y posteriormente fue la encargada de organizar el concurso internacional de arquitectura en la que resultó ganadora la propuesta de Heatherwick Studio, que ha diseñado otros proyectos singulares de interés mundial como las sedes corporativas de Google tanto en Londres como en California.
Este edificio de oficinas será el primer trabajo que Heatherwick realice en España. «La expectación que ha despertado el proyecto ha hecho que varias empresas de prestigio y de sectores muy diversos hayan mostrado ya su interés por instalarse en el que será uno de los edificios de oficinas más emblemáticos de Madrid», han señalado desde la compañía. Las obras de este edificio están previstas que se inicien en el primer trimestre de 2022 y que finalicen en 2024.