Tras un año complicado en cuanto a resultados económicos, y tras concluir una ampliación de capital por 51,32 millones, Nyesa Valores Corporación ha comenzado una nueva etapa en su trayectoria. La compañía ha conseguido capitalizar su deuda y reestablecer su equilibrio patrimonial. Además, ha logrado evitar la solución liquidatoria, tras lo que empezará de nuevo sus proyectos que quedaron aparcados por esta problemática.
Así, Nyesaquiere reactivar y desarrollar Finca La Playa, el proyecto que mantiene vivo en Costa Rica y que pasa por ser uno de los principales activos de la compañía. Es un terreno de 4,4 hectáreas de extensión con una superficie edificable de 813.000 m2, sin límite de densidad, y con la posibilidad de uso mixto, tanto residencial como hotelero. De hecho, el proyecto diseñado comprendería, en primer lugar, 324 apartamentos de 2 y 3 dormitorios; y, como segundo propósito, un hotel de 250 habitaciones, cuya clasificación sería de tres o cuatro estrellas, con el objetivo prioritario de favorecer el turismo local.
Finca la Playa es un resort en primera línea de playa y a media hora de la capital del país, San José, y estaría destinado tanto al turismo internacional como nacional. Este está cobrando una importancia crucial en los últimos años en el que es considerado el mejor destino de Centroamérica. Igualmente, la localización de la región donde está ubicada es idónea, ya que Puntarenas cuenta con uno de los principales puertos de cruceros comerciales de Costa Rica.
La consolidación de una clase media activa en el país, muy por encima de lo que está ocurriendo en otros países de la zona, según los datos del Banco Mundial, está precipitando un movimiento interno que estaría fortaleciendo aún más la ya potente industria turística costarricense. Una importante particularidad del proyecto es que la propiedad está escriturada y registrada a nombre de la compañía, circunstancia que en este país es poco habitual.
Finca la Playa es un resort en primera línea de playa y a media hora de la capital del país
DESINVERSIÓN
El proyecto en su conjunto superaría los 25 millones de euros según el informe de valoración elaborado por Savills Aguirre Newman y Tecnitasa a finales del pasado año. Por otro lado, la zona residencial estaría valorada en 15,25 millones de euros y la hotelera en 9,89 millones de euros. Pero, además de poner en marcha este proyecto como resort, Nyesa valoraría también la opción de la desinversión.
La compañía está envuelta en una nueva estrategia tras la aprobación de la propuesta de modificación del convenio de acreedores y la posterior ampliación de capital por un importe nominal de 51,32 millones de euros. Es por ello que estudia con interés la opción de la desinversión ante una propuesta acorde a las elevadas posibilidades de la zona y de los proyectos que allí se puedan desarrollar.
AMPLIACIÓN DE CAPITAL
La modificación del convenio de la sociedad que la compañía ha acometido y dicha ampliación de capital por 51,32 millones tenían como finalidad atender tanto la deuda concursal como el resto de obligaciones de pago contraídas en el marco de la reorientación estratégica llevada a cabo desde el ejercicio 2019.
Esta propuesta de modificación del convenio se fundamentaba en un plan de viabilidad y de pagos que contemplaba dos alternativas. Por un lado, tres propuestas de pago destinadas a acreedores con privilegio, ordinarios o subordinados; y, por otro, como alternativa al plan de pagos, una propuesta de capitalización, total o parcial de su crédito, a todos los acreedores de la sociedad.
Debido a estas nuevas operaciones, el inversor Mariano Schoendorff se ha convertido en uno de los accionistas de referencia de la compañía. Sus derechos de voto representan el 13,39%, en torno a 819,7 millones de acciones, valoradas a precios actuales de mercado en 5,5 millones de euros.
