El limbo del Imserso deja balnearios atrapados y sin expectativas en 2021

El Gobierno sigue jugando con los balnearios y con los usuarios inscritos en el programa de termalismo del Imserso manteniéndolos atrapados en un limbo que produce pérdidas millonarias a los primeros y desesperanza a los segundos. Nadie se explica el abusivo retraso en la puesta en marcha del programa de termalismo y las comarcas afectadas por la ausencia de visitantes a los balnearios empiezan a sufrir las consecuencias, con cierres de otros negocios y pérdida de población por la fuga de trabajadores a otras zonas.

La inacción del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 dirigido por Ione Belarra es manifiesta y está hundiendo a un sector muy castigado durante los últimos dos años. Iniciado noviembre se sigue sin saber si al final comenzará o no en este 2021 el programa de termalismo, si bien este martes se desatascaba la licitación del programa de turismo del Imserso (costas, islas e interior), solo parcialmente, a falta todavía de posibles recursos, para el que existe un plazo administrativo de 15 laborales.

El 70% de los solicitantes del programa del Imserso sigue a la espera y los balnearios bloqueados

Según el presidente de la Asociación Nacional de Balnearios (Anbal), Miguel Mirones, «estamos ya en la primera semana de noviembre y las fechas se van comiendo la posibilidad de ejecutar los presupuestos». Cada día que pasa «la situación empeora, ya que, si finalmente se activa el programa de termalismo, que no lo sabemos siquiera, habrá menos plazas disponibles para este año».

¿POR QUÉ NO SE PONE EN MARCHA EL PROGRAMA?

«Que yo sepa no hay ningún problema, ni ninguna causa que justifique un retraso de estas proporciones» apunta el representante sectorial. En junio ya se alcanzaron «los acuerdos económicos del programa de termalismo y desde entonces se tenía que haber realizado la tramitación de los contratos para haber comenzado en el mes de octubre». Ahora mismo lo que se está haciendo es «el trámite del procedimiento de los contratos del Imserso con cada uno de los balnearios», algo que debía haberse llevado a cabo durante el verano.

«No existe ninguna certeza, todo es especulación en cuanto a las fechas y, sin fechas, es imposible hacer una planificación», comenta Mirones, algo que parece pasarle desapercibido al Gobierno.

PÉRDIDAS MILLONARIAS

Muchos balnearios han estado esperando hasta «este Puente de Todos los Santos para tomar una decisión y hay varios que, pasado el período festivo, van a cerrar sus instalaciones, no sé si a la espera de que de señales de vida el Imserso o directamente hasta marzo del año que viene», señala el presidente de Anbal.

«Cada uno se hará su composición en función de si el Gobierno da una fecha de inicio, si es que la da, que no lo tenemos nada claro, y en función de lo que puedan aguantar de aquí a diciembre, porque algunos balnearios lo tienen difícil para salvar pérdidas», comenta Mirones.

En muchos municipios vinculados al termalismo «el cierre del balneario o la ausencia de visitantes al mismo ha conllevado un descenso muy significativo de la actividad hostelera y comercial, produciéndose cierre de negocios de manera temporal e incluso definitiva, ante la falta de actividad».

«Las 35.000 plazas perdidas ya en el mes de octubre (se contaba con 58.000 para el último trimestre de 2021) hubieran generado un volumen de negocio de 19 millones de euros directos, más todo el negocio indirecto que se hubiera producido en la hostelería y el comercio de los municipios. Hablamos de pérdidas solo en el mes de octubre de más 20 millones de euros», asegura el interlocutor de los balnearios.

DECENAS DE MILES DE JUBILADOS A LA ESPERA

Por otro lado, los mayores se sienten engañados por un Ministerio que parece haberles olvidado, y lo que es peor, en una cuestión que afecta directamente a su salud. «Hay mucha gente mayor que cuando llamaban en octubre al teléfono del Imserso, les decían que se esperaran un poco que en noviembre iba a haber novedades», afirma el directivo de Anbal.

Esta contestación ha llevado a engaño a usuarios habituales del programa público de viajes para mayores, ya que «muchos jubilados todavía siguen confiando en la reactivación, sin caer en la cuenta de que aún en el caso de que se pusiera en marcha el programa este mes, ya no podría haber plaza para todos, porque se han perdido casi 40.000 plazas desde la fecha de inicio prevista», denuncia Mirones.

De hecho, «el 70% de las personas que habían solicitado plaza en un balneario en el programa del Imserso, sigue esperando la decisión del Ministerio para tomar ellos su propia decisión», apunta. Del otro 30%, «varios miles de personas han disfrutado ya de balnearios que han hecho una propuesta social alternativa y otros han decidido ya olvidarse hasta el año que viene».

«Esto lo que hace es paralizar el mercado, porque muchos de los que se quedarán sin plaza a lo mejor podrían haber adquirido alguna de esas ofertas directas que han hecho varios balnearios», reprocha Mirones.

Para comprobar la difícil situación del sector, a modo de ejemplo, Mirones explica cómo en la cadena que él dirige, Relais Termal «contamos con nueve balnearios y solo cinco abiertos en este momento, de los cuales estamos valorando en mantener dos o tres abiertos en función de si hay una respuesta inmediata del Imserso».

El efecto dominó de este retraso administrativo arrastra a otros sectores de actividad, no sólo de los municipios que acogen estos establecimientos, sino que el alcance se extiende a las localidades próximas, todas en zonas rurales apartadas y desfavorecidas.

Los balnearios se ubican en lugares caprichosos, donde existen manantiales de agua mineral natural en torno a los cuales se levantan villas termales. El sector sigue en un limbo perverso a falta de que el Imserso decida, de una vez por todas, qué ocurre con el programa de termalismo.

María Castañeda
María Castañeda
Redactora de MERCA2 de empresas y economía; especializada en energía, sostenibilidad y turismo.