Gestamp vuelve al beneficio en los nueve primeros meses del año y recorta en 300 millones su deuda

El fabricante de componentes para el sector de la automoción Gestamp volvió a la senda del beneficio en los nueve primeros meses del año, al contabilizar unas ganancias netas de 101 millones de euros, en comparación con las pérdidas de 92 millones de euros del mismo período del año precedente.

Según la comunicación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la compañía experimentó una «significativa» reducción de su deuda neta, de 300 millones de euros entre 2021 y 2020 y que se eleva a 616 millones de euros respecto a 2019, hasta 2.048 millones de euros el pasado mes de septiembre.

La firma española explicó que la mejora de sus resultados en los tres primeros trimestres del año es consecuencia de la reducción de los gastos financieros y del mayor control de las variaciones del tipo de cambio.

No obstante, apuntó que el beneficio neto se vio afectado por la evolución del margen de Ebitda (beneficio bruto de explotación) «en un entorno de mercado más volátil», así como por depreciaciones y amortizaciones, puesto que los volúmenes «están muy por debajo» de la capacidad de utilización prevista.

Entre enero y septiembre, la empresa registró una facturación de 5.879 millones de euros, un 15,6% de incremento en la comparativa con los ingresos de 5.083 millones de euros que logró en el mismo período del año previo.

Al cierre de los nueve primeros meses de 2021, Gestamp contabilizó un beneficio operativo de 274 millones de euros, multiplicando por más de quince los registros de un año antes, mientras que el margen operativo alcanzó el 4,7%, frente al 0,4% de dichos meses de 2020.

Además, el beneficio bruto de explotación del fabricante de componentes para automoción fue de 701 millones de euros hasta septiembre, mejorando en un 52% los 460 millones de euros registrados el pasado ejercicio.

CONFIRMA OBJETIVOS

A raíz de los resultados positivos experimentados en los nueve meses, la compañía ha confirmado sus objetivos anunciados previamente para el conjunto del año, que contemplan lograr un margen de Ebitda por encima del 12%, así como mantener un perfil de inversiones de capital «moderado» por debajo del 6,5% de las ventas y reducir su deuda neta en más de 100 millones de euros respecto a 2020.

El presidente ejecutivo de la multinacional española, Francisco Riberas, apuntó que en Gestamp están comprometidos con sus objetivos para el año actual y señaló que han vuelto a demostrar su capacidad para crecer por encima del mercado, «incluso en un contexto desafiante y volátil como el actual».

«Seguiremos centrados en preservar la rentabilidad, la generación de flujo de caja y en seguir reduciendo la deuda neta», subrayó el máximo responsable de la empresa.