Hoy comienzan en algunas comunidades las clases y en otras están a punto de hacerlo. Se acabó lo bueno y el curso escolar está ya aquí. Ya habrás comprado todo lo necesario para tus hijos pero hay algo muy importante que a veces pasamos por alto: la alimentación en el colegio, qué se lleva tu hijo para comer en el recreo. Pues vamos a recomendarte lo más adecuado para que coma sano y alejarle de la temida bollería industrial, sobre todo.
En Occidente cada vez se extiende más otra epidemia: la de la obesidad infantil (en España el 35% de los escolares tiene sobrepeso u obesidad, de los peores datos de toda Europa), fruto de una alimentación demasiado calórica y basada en grasas saturadas. Además, muchos niños no solo no llevan una alimentación sana y equilibrada, sino que en muchos casos está basada en carbohidratos, grasas y mucho picoteo de lo más contraproducente, y que marcará su futura salud, aunque suene demasiado pesimista. Veamos cómo empezar a evitarlo.
6TIRA DE LOS CLÁSICOS: SÁNDWICHES Y BOCADILLOS

Todos recordamos nuestra infancia llevando bocatas al colegio para el recreo. Pues que no decaiga la tradición, pero sustituyendo patés con mucha grasa o chorizo por alimentos más sano. Aprovecha porque a los niños siempre les atraen los bocadillos, el pan camufla mucho y es fácil de transportar y comer. Lo mismo para los sándwiches.
La mejor opción es con pan integral y así se acostumbrarán para la edad adulta y siempre comprarán este tipo de pan. Y por supuesto, dentro del ‘bocata’, opciones saludables como una tortilla francesa, pavo, queso fresco, humus, aguacate, tomate, bonito y aceite de oliva. Con ello puedes hacer combinaciones deliciosas para que no se canse.