La ocupación rural media en España en los meses de julio y agosto se situó en el 56,5%, siendo el mejor dato registrado en los últimos años, medio punto más que el alcanzado en 2020 (56%), además de casi duplicar la cifra de 2019 (32%), según datos de la web EscapadaRural.com.
El contexto del segundo verano en pandemia ha jugado a favor de la oferta rural, puesto que los viajes de los españoles han sido en su gran mayoría nacionales mediante coche particular, a destinos apartados y de naturaleza, y en hoteles pequeños y rurales.
En julio el dato registrado fue del 46% y en agosto la cifra de ocupación se elevó hasta el 67%. El porcentaje se ha extraído de los más de 18.000 alojamientos rurales registrados en la plataforma digital, lo que representa el 95% del total de casas registradas en España.
La cifra de ocupación del mes de agosto supone un récord histórico de reservas, superando por dos puntos porcentuales el dato de 2020. Para la directora de Marketing de EscapadaRural.com, Olivia Fontela, el ritmo de reservas a finales de julio les hacía ser optimistas de cara al mes de agosto, pero han cerrado el mes mejor de lo previsto superando incluso los buenos porcentajes conseguidos el año pasado.
Sobre julio, Fontela ha destacado que el séptimo mes del año ha cerrado con una ocupación solo un punto inferior a la del año pasado, con un 46%. «A mediados de mes las previsiones eran algo más elevadas pero las cancelaciones de última hora provocaron que finalmente hayamos cerrado el mes con cifras similares a las de julio de 2020».
NAVARRA Y ASTURIAS, LAS COMUNIDADES PREFERIDAS
Por comunidades, en agosto las preferidas para alojarse en un entorno rural fueron Navarra y Asturias (79% de ocupación), Galicia (74%), seguidas de Murcia, Cantabria y Andalucía (72%).
En julio, las favoritas para realizar turismo rural fueron Murcia (56%), Andalucía (55%), Madrid y Navarra (53%) y Asturias, que tuvo una ocupación del 50%.
Según Fontela, que varias comunidades autónomas estén por encima del 70% de ocupación es una noticia que les hace estar muy satisfechos, y demuestra que «el viajero este verano ha apostado por las casas rurales en destinos tranquilos, lejos de las ciudades».
