Colofón de la ‘Ley Rider’: se hunde Deliveroo mientras Glovo la capea

La denominada ‘Ley Rider’ aún no ha entrado en vigor y ya ha dejado su primera víctima. Deliveroo ha decidido poner tierra de por medio y dejar su negocio en España. El mercado se lo quedarán Glovo, Uber Eats y Just Eat. Los tres ‘deliverys’ también están dando pasos para acogerse a la nueva ley.

La norma promovida por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, entrará en vigor el próximo 12 de agosto. Esta norma, consensuada con los sindicatos y la patronal, recoge varios puntos en favor de los ‘riders’. Lo más importante, con esta ley se reconocerá la relación laboral entre la empresa y sus trabajadores. Esto quiere decir que los ‘riders’ dejarán de ser falsos autónomos y se convertirán en trabajadores por cuenta ajena, con los derechos sociales que esto implica.

Además, la nueva norma también otorga la oportunidad a los ‘riders’ de conocer las reglas de los algoritmos y los sistemas de inteligencia artificial que pueden perjudicar sus condiciones laborales. También podrán consultar el acceso y mantenimiento del empleo y sus perfiles. Esta medida se debe a que, legalmente, todo trabajador tiene derecho a conocer las razones de aquellas decisiones que pueden afectarle.

Antes de la ‘Ley Rider’, ninguna de las plataformas de ‘delivery’ más consumidas, es decir, Glovo, Deliveroo y Uber Eats, tenían implementadas estas medidas. A falta de una semana para que entre en vigor, Deliveroo ha sido el primero en mover ficha decidiendo irse del país.

Mientras existan las aplicaciones habrá relación laboral entre empleado y empleador

La compañía británica veía que los nuevos costes que le iba a suponer aceptar la ley la ahogaría económicamente. Sin embargo, la competencia que estaba viviendo con Glovo y Uber estaba arrinconando a Deliveroo a la tercera posición del mercado, lo que reducía sus ingresos. Esta decisión les va a salir por un pico, ya que la empresa de entrega a domicilio ha abierto un procedimiento de despido colectivo donde les tiene que dar de alta en la Seguridad Social. De no hacerlo así, la sanción a la que podría enfrentarse sería millonaria.

EL NUEVO MODELO DE GLOVO NO SERÍA SUFICIENTE

Ahora, la tarta del ‘delivery’ se repartirá entre Glovo y Uber Eats, compañías que también tienen que hacer cambios para adaptarse a la nueva ley. La primera en dar el paso fue Glovo que presentó el que será su nuevo modelo para operar legalmente. La intención de la empresa española es contratar a 2.000 ‘riders’ en las grandes ciudades donde tienen más clientes y, por ende, mayor margen de negocio. Para completar a estos trabajadores, tiene pensado seguir operando con 8.000 autónomos en el resto de lugares. La empresa argumenta que estos autónomos tendrán mucha más flexibilidad que antes.

Según explicaba a medios Diego Nouet, director general de Glovo en España y Portugal, “para ajustarnos a la legalidad, hemos creado un modelo inédito de colaboración en el que otorgamos más independencia a los mensajeros autónomos. Ya no estarán sometidos a las franjas horarias, sino que tendrán libre elección de jornada. Los ‘riders’ también fijarán los precios del servicio, un poder que ahora estaba en manos de las plataformas”.

Sin embargo, desde los sindicatos no ven bien esta medida al considerarla “ilegal” al ir en contra de lo dictaminado por el Tribunal Supremo. Consideran que, por mucha flexibilidad que se le dé al autónomo, sigue habiendo relación laboral que queda definida por la aplicación. La conclusión que sacan es que mientras existan las diversas ‘apps’, existirá una relación laboral.  

Por su parte, Just Eat negocia con los sindicatos el primer convenio colectivos para ‘riders’. Hay que señalar que esta empresa de reparto a domicilio era la única que tenía a sus trabajadores en régimen por cuenta ajena. Siempre ha sido muy crítica con sus competidoras por su forma de contratar al acusarlas de competencia desleal.  

Habrá que esperar al 12 de agosto para saber los últimos movimientos de estas empresas de entrega a domicilio. Desde el ministerio, ya han dejado claro que habrá duros controles para garantizar que se respete el derecho de los trabajadores. Sobre plano, Glovo será el mayor beneficiado de la marcha de su rival, pero habrá que ver como se aplica la ley y si alguna, finalmente, sufrirá alguna represalia.

Lidia Vega
Lidia Vega
Redactora de economía y empresas especializada en Distribución, Alimentación y Consumo