En el mercado español existen instituciones financieras (cajas, bancos y neobancos) que ofrecen la posibilidad de abrir cuentas bancarias, cada una con características diferentes. Las cuentas bancarias son instrumentos financieros que permiten proteger el dinero y realizar operaciones ordinarias como transferencias y compras. Además, se pueden obtener ventajas con la nómina o ingresos recurrentes. Es necesario conocer todas las características de cada tipo de cuenta para seleccionar la que más se adapte a las necesidades de cada uno.
Para escoger de manera sencilla la cuenta más adecuada, se puede recurrir a un comparador de productos financieros, como el que se encuentra en la página web Economía Responsable. Allí se conseguirá toda la información necesaria sobre apertura de cuentas.
Ejemplos de cuentas bancarias
Las cuentas bancarias son un contrato financiero que se realiza con una entidad bancaria, donde se depositará un dinero que la institución bancaria está obligada a proteger. El titular de la cuenta puede hacer uso del dinero en cualquier momento y realizar operaciones de todo tipo. De todos modos, hay una gran cantidad de modalidades de cuentas bancarias, cada una con características muy particulares, relacionadas con la rentabilidad que ofrecen o con los costes asociados por las transacciones.
Cuenta corriente
Las más conocidas son las cuentas corrientes, ya que tienen todas las funcionalidades necesarias y para abrirlas no hace falta vincular una nómina o recibo. Además, tienen asociada una tarjeta de débito que permite retirar dinero efectivo de cajeros o pagar en establecimientos. Por otro lado, permite hacer transferencias y solicitar tarjetas de crédito. Su principal desventaja es que el dinero resguardado no es remunerado.
Cuenta nómina
Las cuentas nómina también son bastante conocidas. Su apertura requiere domiciliar un recibo, algún ingreso o la nómina. Son algunas de las más utilizadas por los trabajadores.
Cuenta ahorro
También existen las cuentas de ahorro, cuya principal misión es remunerar el dinero depositado por el cliente. Estas no están asociadas a ninguna tarjeta de débito y ofrecen ciertas limitaciones a la hora de realizar transferencias bancarias.
Cuenta remunerada
Las cuentas remuneradas, que son menos conocidas, ofrecen un tipo de interés. A la hora de abrir una cuenta de este tipo, es necesario vincular ingresos como la nómina o recibos.
Cuenta joven
Este tipo de cuenta, ofrecida por algunas entidades, está diseñada para los menores de 35 años. Cuenta con una serie de requisitos y ofertas específicas pensadas para la situación económica de los jóvenes.
Estas son solo algunas de las variedades de cuenta que existen a día de hoy. Al momento de abrir una cuenta es importante conocer en detalle las características de cada una para poder escoger la que más se adapte a los requisitos de cada situación económica. Para hacerlo, la mejor opción es visitar la página web de Economía Responsable, ya que allí es posible encontrar todo la información que se necesita para tomar la decisión, con comparativas sobre las cuentas más recomendadas y consejos sobre cual elegir.