La vacuna de Moderna fue la segunda aprobada por la Unión Europea poco después de la de Pfizer. Es una vacuna de ARNm que requiere 2 dosis que se administran con 28 días de diferencia. Cuando se comenzaron a administrar, no presentaron efectos secundarios de gravedad, únicamente síntomas leves que indicaban que el cuerpo estaba desarrollando inmunidad. Tras la campaña masiva de vacunación para proteger a la población los efectos secundarios se han incrementado.
Protección de Moderna frente al Covid-19
El fabricante de Moderna ha confirmado que su vacuna tiene una eficacia del 93,6% que ha sido demostrada en el último ensayo clínico realizado a gran escala. Hay que continuar con las medias de protección que recomiendan los sanitarios ya que la vacuna no te protege del todo. El uso de las mascarillas y la distancia social deben seguir presentes para evitar los contagios. La inmunidad completa se adquiere a los 42 días desde que se administra la primera dosis, por lo que el proceso finalizaría a las 2 semanas de recibir la segunda dosis.
