La Ley de Segunda Oportunidad es un mecanismo que busca prestar un auxilio financiero a las personas que han caído en una situación de sobreendeudamiento, imposibilidad de pagar o que están en quiebra debido a las deudas.
Esta Ley tiene algunos requisitos que determinan si una persona puede acogerse o no a esta Ley. Si quieres saber si cumples los requisitos, sigue leyendo.
¿De qué trata la Ley de Segunda Oportunidad?
Los asesores en la Ley de Segunda Oportunidad explican que se trata de una ayuda para las personas en momentos críticos y que, por medio de esta ley, pueden ver exonerada su deuda, o bien, renegociada con mejores condiciones.
Para esto, el deudor debe formalizar la solicitud ante una notaría, con un documento redactado por un abogado experto en esta ley. En ese momento puede dejar de pagar los préstamos, para que se inicie el procedimiento.
Luego se inicia una fase de negociación con los acreedores, en la cual debe presentar una propuesta a través de sus abogados. Si no se llega a un acuerdo entre las dos partes, entonces se entra en una fase judicial.
Requisitos de la Ley de Segunda Oportunidad
La Ley de Segunda Oportunidad tiene algunos requisitos para garantizar que sea utilizada solo en los casos en los que sea necesario y que los derechos de los acreedores también sean protegidos.
Veamos cuáles son:
- El solicitante no debe tener antecedentes penales por delitos socioeconómicos en los últimos 10 años.
- Las deudas totales no deben superar los 5 millones de euros.
- El solicitante no puede haberse acogido a este mecanismo en los últimos 5 años.
- Las deudas deben haber sido contraídas actuando de buena fe.
¿Qué es actuar de buena fe?
Tal vez sea muy difícil determinar si una persona actuó de buena fe al contraer una deuda, pero hay algunos casos en los que es evidente, como puede ser:
- Si al momento de contraer la deuda, la persona tenía capacidad económica para hacer frente a los pagos, y posteriormente, sucedió algo que cambió sus finanzas. Por ejemplo, un despido laboral, la quiebra de un negocio, destrucción del patrimonio personal, etcétera.
- Si la persona ha tratado de llegar a un acuerdo para hacer frente a la deuda, proponiendo alternativas y haciendo esfuerzos notorios.
- Si se comprueba que la persona no posee patrimonio suficiente para hacer frente a la deuda.
Consejos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad
Esta ley es un mecanismo muy importante que puede beneficiar a muchas personas para salir de baches económicos graves, sin embargo, hay que conocer todos los detalles de este mecanismo para que pueda ser utilizado correctamente.
Veamos algunos consejos:
- Es importante contratar un despacho de abogados expertos en esta ley, de manera que se hagan los procedimientos de forma adecuada y todo sea un éxito.
- Lo siguiente será firmar un documento nombrando a los abogados como representantes, de manera que no se tenga que hacer frente a llamadas de cobros u otras situaciones desagradables.
- Se debe ser muy sincero y exponer todas las posibilidades para cancelar la deuda. Los abogados tienen que presentar una propuesta de acuerdo con los acreedores, es necesario que sea honesta y apegada a la realidad.
- Siempre es conveniente para el deudor unificar las deudas, eso puede ayudar a un mejor control de los pagos y a organizar mejor la gestión financiera.
Aspectos adicionales
- Desde 2019 se incluyen en este mecanismo las deudas contraídas con entidades públicas, como la Hacienda Pública, por ejemplo.
- La solicitud ante el notario le corresponde a las personas naturales, y si se es autónomo, el organismo a recibir la solicitud es el Registro Mercantil o la Cámara de Comercio.
- El proceso completo puede tardar de 6 meses a un año.
Como puedes ver, la Ley de Segunda Oportunidad es un gran beneficio que puede significar que un deudor se pueda volver a levantar para comenzar de nuevo su actividad laboral.