El adiós de Antonio Caño: ¿un debate sobre partidismo?

Antonio Caño llevaba tres años disfrutando de una prejubilación dorada en el Grupo Prisa a pesar de haber perdido el sillón como director de El País pocos días después de que el Partido Popular saliese del Gobierno.

El veterano periodista, considerado como afín a Soraya Sáenz de Santamaría y Juan Luis Cebrián, denuncia que su despido está motivado «por cuestiones ideológicas» es «ilegal» no tiene «precedentes en la historia de Prisa».

«Durante mi etapa como director todos los anteriores directores tuvieron libertad plena para expresar sus opiniones en artículos y columnas», añade. Y sostiene que su despido es «un atropello a la libertad de expresión».

LA DESMEMORIA DE ANTONIO CAÑO

Muy enfadado se muestra Antonio Caño, que llevaba tres años firmando un artículo al mes y realizando labores se asesoramiento en Prisa que en realidad era «un cargo para justificar su latisueldo», explican fuentes del grupo a MERCA2.

Las mismas fuentes aseguran que resulta paradójico que Caño califique su despido de «atropello a la libertad de expresión» cuando en su etapa como director de El País fue famosa su censura a una información relacionada con el marido de Soraya Sáenz de Santamaría, que fichó por Telefónica por el interés político de la multinacional. 

El 15 de julio de 2015 El País en su primera edición informaba sobre la entonces vicepresidenta y su marido, Iván de la Rosa: «Justicia permite a Santamaría tratar asuntos de Telefónica, donde trabaja su marido». El texto contenía una información de Manuel Altozano y Rafael Méndez.

Pero en las siguientes versiones la dirección de El País cambió el enfoque de la noticia y tituló de la siguiente forma: «Santamaría se abstiene en los asuntos de Telefónica pese a no estar obligada». Méndez y Altozano pidieron no firmar la pieza y dimitieron del periódico mientras Caño plegaba la línea editorial del mismo a los intereses de La Moncloa, con la que toreaba Juan Luis Cebrián para evitar la quiebra del grupo.

LOS PALOS DE CAÑO

Caño llevaba tiempo aprovechando sus columnas para arremeter contra el Gobierno de Pedro Sánchez. El exdirector de El País aseguró este pasado mes de febrero que el Ejecutivo liderado por el PSOE está siendo incapaz de hacerla brillar en el plano internacional.

«La ausencia de España en el mundo es grave en sí misma, pero lo es aún más por lo que significa como manifestación de algo mucho más profundo: la ausencia de España como idea capaz de aglutinar a una sociedad. España dispone de argumentos de sobra con los que reclamar el respeto internacional, el principal de los cuales sigue siendo el de la ejemplaridad de una democracia generosa incluso con quienes día a día tratan de destruirla«, escribía.

Caño aprovechaba que el Pisuerga pasaba por Valladolid para arrear a dos de sus víctimas más propicia durante su etapa como director de El País: Podemos y ERC: «Pero, desafortunadamente, no existe motivación política suficiente para destacar esos méritos. La polarización y el sectarismo se han demostrado mucho más rentables. Los nacionalistas y los populistas han sabido explotar esa debilidad para dejar a España fútil e inerme».

ANTONIO CAÑO

Antonio Caño Barranco (Martos, 1957) es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Trabajó en la agencia EFE y, en 1982, se incorporó a El País. Antes de ser director, ejerció como redactor jefe de Internacional, subdirector de la edición dominical o responsable de la sección de Investigación y análisis. Fue corresponsal en México y Centroamérica y en Washington, destino en el que estuvo más de una década.

El 4 de mayo de 2014 fue nombrado director de El País. Estuvo en el cargo hasta el 8 de junio de 2018, fecha en la que Soledad Gallego-Díaz asumió la dirección.