La vida de los autónomos no es fácil. Aún así, sigue habiendo miles de personas que se lanzan a la apasionante aventura de emprender y tener su negocio. Aunque hay quien emprende por necesidad, en la mayoría de los casos lo que hay detrás de alguien que empieza a trabajar por su cuenta es la ilusión por tener un proyecto propio.
Pero no todos los que se dan de alta en el RETA están igual de contentos y de satisfechos con lo que han conseguido. Un reciente estudio llevado a cabo por La Caixa ha puesto de relieve que muchos profesionales por cuenta propia preferirían ser asalariados.
1Autónomos “a la fuerza”
Es interesante diferenciar entre el autónomo por necesidad y el autónomo a la fuerza. Quien emprende por necesidad lo hace porque ven el el autoempleo una buena forma de volver al mercado laboral y ganarse la vida. Aunque podríamos decir que ha llegado a ser autónomo casi de rebote, se siente satisfecho con la elección y tiene ilusión por su proyecto.
Diferente es la situación del autónomo a la fuerza. Se trata de alguien que ha emprendido por necesidad pero que no siente ninguna vinculación con su negocio y no siente ningún tipo de ilusión por tener su propio proyecto profesional. Son precisamente estos autónomos a la fuerza los que más descontentos están con su situación y preferirían volver a ser asalariados.