Nueva pica en el este de Europa: Iberdrola se hace fuerte en Polonia

Iberdrola en estos momentos se encuentra en una posición delicada debido a la situación legal de su presidente Ignacio Sánchez Galán con respecto a la relación con el excomisario José Manuel Villarejo. Aunque eso no es eximente para que muestre, de nuevo, su capacidad inversoras en todos los mercados donde opera.

De hecho, en el caso de Polonia, donde Iberdrola se ha adjudicado 50 de los 300 megavatios (MW) eólicos terrestres que había en juego en la subasta de nueva capacidad, la compañía muestra cómo sabe reahcerse de contextos negativos. En concreto, fue en este país donde tuvo que desmontar un proyecto de eólica marina cuando estaba muy avanzado, aunque ahora en ambas actividades ha sabido reponerse.

Pero la energértica española quiere sacudirse tanto problemas legales como las piedras en el camino del pasado, y de esta manera impulsa su apuesta por las renovables en Polonia (y el este de Europa), donde cuenta ya con un equipo local de desarrollo, situando su capacidad eólica terrestre operativa y en desarrollo en el país en 163 MW, tras culminar recientemente su acuerdo con CEE Equity Partner, suscrito en marzo, que contemplaba la adquisición de dos parques eólicos operativos, con 112,5 MW de potencia, y el acceso a un tercero, de 50 MW, confirmado en esta subasta.

Además, la compañía cuenta con una cartera de siete proyectos ‘offshore’ (marina), con una capacidad potencial de hasta 7.300 MW, tras la reciente adquisición del 70% del promotor Sea Wind.

Con esta nueva adjudicación, el grupo reafirma su estrategia de crecer en países con rating ‘A’ -más del 75% de su resultado bruto de explotación (Ebitda) en 2020 procedió de geografías con esta calificación-.

Enmarcado en el impulso de la eólica marina en esta región, Iberdrola trabaja en la puesta en marcha del Sea Baltic Hub, un polo renovable en el mar Báltico llamado a actuar como epicentro de servicios ‘offshore’ y ‘onshore’, además de proporcionar contenido local a los proyectos de Iberdrola en el eje Alemania, Polonia y Suecia. El Báltico tiene un potencial de desarrollo eólico marino de 93.000 MW, de los que 28.000 MW se ubicarían en aguas polacas.

La energética señaló que la participación en la subasta de Polonia está en línea con su estrategia de posicionarse en nuevas plataformas de crecimiento renovable, y tras la docena de operaciones corporativas realizadas en el último año en países como Australia, Francia, Japón, Suecia, o Irlanda.

APUESTA POR LA EÓLICA MARINA

Uno de los grandes polos de crecimiento de la compañía para los próximos años será, precisamente, la eólica marina, donde Polonia cuenta con ambiciosos planes, ya que aspira a que el 23% de su ‘mix’ energético provenga de energías limpias al final de la década, para lo que el país prevé poner en marcha 8.000 MW eólicos en el mar.

En términos globales, la cartera eólica marina de Iberdrola asciende a 20.000 MW al cierre del primer trimestre del año, asentada sobre estas nuevas plataformas de crecimiento que permitirán al grupo alcanzar una potencia instalada en el mar de 12.000 MW al final de la década. Ya en 2020, la energía eólica marina aportó al Ebitda de Iberdrola 585 millones de euros, tras crecer un 72%; si bien su aportación ascenderá hasta los 2.300 millones de euros en 2030.

Raúl Masa
Raúl Masa
Ex Coordinador de redacción y redactor de empresas y economía; especializado en telecomunicaciones, tecnología y energía.