Las telecos españolas, más cercanas a la administración para no perder terreno

Los grandes operadores de telefonía europeos llevan años perdiendo terreno frente a sus pares estadounidenses. Según datos de JPMorgan, en la última década el negocio móvil en el viejo continente ha caído un 2% anual cada ejercicio, por el aumento cercano al 4% en Estados Unidos. En este punto, ha llegado la hora de revertir la situación ante unos problemas que están detectados. La relación con la administración pública es una de las grandes claves.

Así se refleja en un demoledor informe de JPMorgan publicado este mes de junio donde dibuja las tres claves que han llevado a las telecos europeas -y eso incluye a las compañías que operan en España- a un continuo deterioro de su negocio. En gran medida por la relación con las administraciones públicas y los reguladores.

En primer lugar se destaca la limitación en el crecimiento de los operadores y sus economías de escala. También señala que se ha generado una competencia artificial excesiva. Donde España representa un claro ejemplo en la actual guerra de tarifas que ha erosionado de manera significativa los márgenes de las telecos. Esto se refiere a la voluntad europea -y española- de que existan la mayor cantidad de compañías.

Por último, señala que se ha perdido relevancia en la cadena de negocio de TMT (Technology, Media & Telecommunication). Es decir, no solo dentro del sector de las infraestructuras relacionadas con la telefonía, sino que en un ecosistema mayor también se ha perdido presencia.

¿DÓNDE ESTÁN LAS SOLUCIONES?

La gran pregunta ante esta tesitura es saber si hay vuelta a atrás para ganar competencia con otras regiones. Y la respuesta que ofrece el informe es positiva para las telecos europeas.

Siendo parte del problema, la relación con la administración pública también será parte de la solución. En concreto, explican los analistas que las grandes telecos están acercando posturas con los gobiernos nacionales y regionales para la identificación de objetivos comunes de cara a trabajar de manera conjunta. De igual modo, asume el informe que se está colaborando de manera más coordinada con los responsables de políticas públicas para que dichos objetivos sean lo más similares posibles.

DÓNDE QUEDAN LAS TELECOS ESPAÑOLAS

La situación española es una mímesis de lo que sucede a nivel europeo. En cuanto a la erosión del negocio en la última década es una realidad que, entre otras cosas, se ha llevado miles de trabajadores por delante. A nivel económico, también se ha sentido en la caja. Pero hay un reverso positivo.

Según ha podido recabar MERCA2 en fuentes del sector, la relación entre operadores de telefonía y Gobierno vive un buen momento. Se trata de una relación de interés para ambas partes, algo que les ha unido más todavía.

Por un lado, y como refleja el informe, las decisiones públicas han afectado directamente a las telecos en los últimos años. En parte, porque las compañías han sido de las menos beligerantes a la hora de generar conflictividad con la administración pública. De igual manera, y tras la pandemia, los diferentes entes públicos se han dado cuenta de la necesidad de unas infraestructuras de red muy sólidas para la implementación total de una digitalización integral.

Además, aseguran dichas fuentes, los objetivos de ambas partes están más alineados que nunca. Y no solo eso, los reguladores también han asumido que, efectivamente, hay cierta asimetría con las grandes multinacionales americanas y se debe regular en consecuencia.

Estas cuestiones por si solas no van a sacar del atasco a las telecos. Es decir, una buena relación con la administración pública solo es eso, una buena relación. Pero ambas partes han asumido la importancia del otro para no perder el paso frente a otros mercados como el estadounidense o el asiático. Sobre todo a nivel de regulación y legislación, donde la exigencia a las telecos Europas (y españolas) ha sido máxima.

Raúl Masa
Raúl Masa
Ex Coordinador de redacción y redactor de empresas y economía; especializado en telecomunicaciones, tecnología y energía.