Enagás reafirma su compromiso con la transición ecológica y el empleo

La Junta General de Accionistas de Enagás ha aprobado las cuentas de 2020, el informe de gestión y todos los puntos incluidos en el Orden del Día. Durante su celebración, el presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha señalado que en el contexto actual es prioritario “trabajar por la reconstrucción y por un futuro que no deje a nadie atrás”, y ha destacado que “en Enagás lo estamos haciendo”.

Llardén ha recordado el “objetivo de contribuir a una transición justa como base para la recuperación económica, especialmente en los territorios más afectados por la transición energética, creando empleo sostenible y haciendo más competitiva la industria española”.

Ha apuntado además que “mantener y crear empleo es una prioridad para Enagás” y ha detallado que en 2020, un año en el que la pandemia provocó una pérdida masiva de empleo, la plantilla de la compañía se incrementó un 2%. En esta línea, ha hablado de “reinventar” la economía: “No se trata solo de reactivar, sino de crear nuevas industrias, que sean sostenibles en el tiempo”, ha destacado.

Además, Llardén ha tenido palabras de reconocimiento y agradecimiento para los profesionales de Enagás, “que han hecho posible que la energía haya llegado donde más se necesita, durante todas las horas del día y todos los días del año”, también durante la pandemia.

COMPROMISO CON LA DESCARBONIZACIÓN

Desde la perspectiva de la transición ecológica como palanca de cambio, Llardén ha explicado a los accionistas “el total compromiso de la compañía con la descarbonización, un desafío global, urgente e inaplazable”.

En febrero de este año, Enagás adelantó su compromiso de ser neutra en carbono a 2040, hito que ha sido posible gracias a un plan de más de 50 proyectos de eficiencia energética que le ha permitido ya reducir sus emisiones un 63,2% desde 2014. Según ha destacado Llardén, en esta contribución activa a la reducción global de emisiones, “juegan un papel fundamental” las infraestructuras de Enagás. Así, ha explicado que aprovechar las infraestructuras existentes permite que la descarbonización se lleve a cabo de la forma más eficiente y puede facilitar que, en su desarrollo a gran escala, los gases renovables alcancen un precio competitivo.

RECORRIDO DE LOS GASES RENOVABLES

El Presidente de Enagás ha recordado que la compañía “lleva años trabajando en proyectos de gases renovables tanto de hidrógeno verde como de biogás”. Respecto al hidrógeno verde, ha destacado “tres palancas” para hacerlo competitivo: innovación y desarrollo de nuevas tecnologías más eficientes, utilizar todo lo que ya está disponible para descarbonizar, y contar con una vía de financiación para hacer competitivo el hidrógeno verde en una primera fase.

Gracias al recorrido de la compañía en gases renovables, Enagás ha presentado un total de 55 proyectos (34 de hidrógeno verde y 21 de biometano) a las diferentes manifestaciones de interés para los fondos Next Generation de la Unión Europea. Algunos de ellos son también potenciales candidatos a ser proyectos de interés común de la UE (IPCEI).

Respecto al biometano, un recurso energético menos conocido e infrautilizado en España, Llardén ha destacado su “enorme potencial para la descarbonización y para el desarrollo de la economía circular, especialmente en las zonas más despobladas”.

LAS GRANDES ÁREAS ESTRATÉGICAS

Desde el punto de vista estratégico, Llardén ha remarcado la importancia de las tres grandes áreas de negocio de Enagás, que guiarán el futuro de la compañía en el medio plazo: los activos regulados en España, que cuentan con un marco regulatorio estable hasta 2026 y un futuro claramente vinculado a su contribución al proceso de descarbonización; los activos internacionales, que ya están contribuyendo de forma importante a los resultados de la compañía; y la actividad en gases renovables.

OBJETIVOS CUMPLIDOS

Durante su intervención, el Consejero Delegado de Enagás, Marcelino Oreja, ha recordado que Enagás “ha cumplido sus objetivos, por decimocuarto año consecutivo, en un año en el que muchas compañías sufrieron un grave impacto en sus números”. 

En esta línea, ha explicado que Enagás ha sido capaz de cumplir con todos sus objetivos, “e incluso superarlos”, gracias a cuatro factores principalmente: el perfecto funcionamiento de las infraestructuras de la compañía, el control de gastos operativos y financieros, la aportación de 174,8 millones de euros de las participadas -casi un 8% más que en 2019-, y un resultado financiero positivo no recurrente de 18,4 millones de euros.

Entre los principales hitos de 2020, el Consejero Delegado de Enagás ha destacado el inicio en noviembre de la operación comercial del gasoducto europeo Trans Adriatic Pipeline (TAP), infraestructura clave para la diversidad y seguridad energética europea, tras más de 4 años de construcción.

También ha explicado el buen desempeño de Tallgrass Energy, que ha permitido un reparto total de dividendos de 91 millones de dólares en 2021 con cargo a 2020, y ha recordado que en marzo, Tallgrass alcanzó una alianza estratégica con Bridger Pipeline, filial del grupo True Companies y segundo mayor operador de ductos en la cuenca de Bakken, para crecer en el mercado estadounidense.

RETRIBUCIÓN AL ACCIONISTA

La Junta General de Accionistas ha aprobado un dividendo total por acción de 1,68 euros con cargo al ejercicio 2020, lo que supone un incremento del 5% respecto al de 2019.

En esta línea, Llardén ha recordado que una de las prioridades de la compañía es ofrecer al accionista una retribución atractiva y sostenible, y ha reiterado el compromiso de seguir incrementando el dividendo un 1% anual como mínimo para 2021, 2022 y 2023. “A partir del ejercicio 2024, y hasta 2026, con los datos que tenemos hoy, nos comprometemos a mantener un dividendo sostenible de 1,74 euros por acción”, ha añadido.