La guerra abierta entre Caixa e IFM traba el Plan Estratégico de Naturgy

Naturgy sigue quedándose rezagada respecto a sus competidores. La compañía liderada por Francisco Reynes está en la actualidad sin una hoja de ruta futura, tras haber pospuesto la presentación de su nuevo Plan Estratégico dos veces. Una incertidumbre «sobre la estrategia a largo plazo» que ya resaltaron negativamente las agencias de calificación. Y que, por si fuera poco, se prevé que vaya en aumento, tras la guerra abierta entre el máximo accionista, CriteriaCaixa, y el nuevo aspirante, el fondo australiano IMF.

La pandemia ha provocado un súbito acelerón de algunas tendencias. La más visible es la adopción de la digitalización. Pero hay más sectores por lo que han pasado varios años en apenas unos meses como es el caso de la industria energética. Así, las grandes firmas como Iberdrola o Repsol, también Endesa o su propietaria Enel, se vieron obligadas a rehacer sus planes futuros para acompasarlos al nuevo entorno. Una nueva realidad en la que confluyen planes de inversiones estatales de magnitudes prácticamente nunca vistas y exigencias, en materia verde, más ambiciosos de los previstos en un principio.

El cóctel explosivo llevó a que, por ejemplo, Repsol haya acelerado en su ambición verde con su entrada en Estados Unidos. También la disputa abierta entre Enel o Iberdrola para liderar las inversiones en renovables, con cantidades estratosféricas, en los próximos años. Incluso a Endesa también forcejeando con la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán por captar fondos de la Unión Europea. Todos parecen moverse de forma muy rápida excepto Naturgy. De hecho, la gasística funciona por el momento gracias a parches en sus planes antiguos, pero que inevitablemente la están dejando fuera de juego.

S&P YA ALERTÓ QUE SIN PLAN ESTRATÉGICO NATURGY SE QUEDARÍA ATRÁS

La directiva de la firma no lo considera así. Los proyectos se siguen ejecutando y Naturgy también presentó un ambicioso plan para captar fondos de la UE. Pero es evidente de que sin una brújula el camino se hace más difícil y el horizonte a alcanzar más y más lejano. Además, se le une que el sector energético se ha vuelto muy competitivo, con la entrada cada vez más fuerte de los gigantes del petróleo, que atrae las miradas de los inversores. En definitiva, que si había algún momento para perder el rumbo no era éste.

La compañía prefiere no aclarar la situación y simplemente se limita a explicar que su posición es la misma que antes. Pero cada semana que pasa cuenta. La agencia de calificación S&P Global Rating ya lo avisó hace exactamente tres meses en un informe sobre las seis principales utilities europeas. Así, la firma de análisis advirtió de que Naturgy «no parece estar bien alineada con la transición energética», con unas inversiones en renovables que «están por detrás de las de sus pares como Iberdrola, Engie y Enel».

A su vez dio un toque de atención al equipo directivo: «El aplazamiento del plan estratégico añade incertidumbre a la dirección estratégica del grupo a medio y largo plazo y podría ampliar la brecha entre el grupo y sus pares». Por todo ello, S&P colocó en perspectiva negativa a Naturgy a la espera de que lo que ocurriese respecto a la opa de IFM.

CRITERIACAIXA E IFM SE ENZARZAN POR PRIMERA VEZ

Aunque de manera más escueta, pero enormemente profética, también señaló que las intenciones del fondo australiano, siempre y cuando tuviera éxito, provocaría una desalineación de los accionistas si la oferta de IFM tiene éxito «complicaría la ejecución de la estrategia» del grupo. Esa parte última parece ser el próximo capítulo, dado que ahora la trama se circunscribe a la guerra abierta entre CriteriaCaixa y el fondo australiano en cuanto a la opa lanzada. Una batalla que, de nuevo, promete retrasar una vez más la presentación del esperado plan estratégico.

De hecho, el consejo de administración de CriteriaCaixa sorprendió a todos el pasado 18 de mayo cuando aprobó reforzar su posición en el capital social de la gasística española, en su última reunión. Dicho y hecho. Así, el holding empresarial notificó un aumento de su participación en Naturgy al pasar de 24,4% al 24,8% un día después. Pese a ello, IFM parece que no esta dispuesto a rendirse hasta el punto de que a través de la prensa filtró que se afianza en su idea de comprar un paquete representativo de títulos de la firma española.

A todo esto, el Gobierno todavía tiene que decidir si permite la operación o no. Otra cosa, será como ejecutar la compra en caso de recibir el sí que no será nada fácil. IFM deberá acudir al mercado para captar ese 22,7% de los minoristas, dado que ni Criteria ni los otros dos grandes accionistas, los fondos CVC (junto a la familia March) y GIP, van a deshacer su posición. Por último, aunque los australianos consigan todo ello todavía quedaría que todos ellos juntasen sus posturas de cara a un plan a futuro. Al final, las incertidumbres empiezan a ser una verdadera carga para el futuro de la compañía y no parece que vayan a resolverse pronto.

Pedro Ruiz
Pedro Ruiz
Colaborador de MERCA2