El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha intervenido este martes en la duodécima y última junta de accionistas de la entidad en solitario, marcando un punto y final a esta etapa que culmina con su integración con CaixaBank y que provocará que su marca previsiblemente desaparezca este mismo verano.
Goirigolzarri ha recordado el largo recorrido desde que en 2012 iniciara el proyecto, un periodo durante el cual se han atravesado momentos «muy duros». «El camino no siempre ha sido fácil», ha reconocido el banquero.
No obstante, ha dicho con «enorme orgullo» que el equipo ha conseguido durante este tiempo lo que muchos dudaban que fuera posible, es decir, convertir a Bankia en un banco sostenible, solvente y con altos índices de satisfacción por la calidad de servicio prestada.
De hecho, ha subrayado que Bankia pasó de ser el principal problema del sector financiero y de estabilidad en España en 2012, a ser un referente dentro del sector y a contribuir de forma decisiva a la mejora socioeconómica del país.
También ha alabado a un equipo que tuvo que afrontar momentos «tremendamente duros», cuando era difícil sentir orgullo de pertenencia al proyecto.
NUEVA ETAPA
Para Goirigolzarri, la aprobación de la fusión con CaixaBank marca el inicio de una nueva etapa para la entidad. Según ha señalado, el calendario del proyecto sigue su curso dentro de los plazos previstos.
El canje de acciones de la fusión Bankia-Caixabank está sujeto a que el próximo viernes 26 de marzo quede consumada la operación, lo que se producirá si antes de dicha fecha se logran obtener las autorizaciones de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y del Ministerio de Asuntos Económicos.
A partir de entonces comenzará la integración real de las dos entidades, que culminará con la integración tecnológica que, en principio, está prevista para finales de 2021.
«Iniciamos un nuevo proyecto acompañados por el mejor compañero de viaje que podíamos tener para esta nueva etapa, que es CaixaBank», ha reiterado como en otras ocasiones Goirigolzarri.
EL PROCESO DE ADAPTACIÓN NO SERÁ FÁCIL
En esta línea, aunque ha admitido ser «plenamente consciente» de que el proceso de adaptación de los equipos a corto plazo no será fácil, se ha mostrado convencido de que, en el medio plazo, sus profesionales tendrán acceso a muchas mayores posibilidades de crecimiento en sus carreras.
A su vez, ha hecho una especial mención a los miembros del consejo de administración, actuales y pasados. «A lo largo de todos estos años, los consejeros del banco del que ustedes son propietarios han dado un permanente ejemplo de dedicación, profesionalidad y de profunda independencia, y subrayo la profunda independencia», ha indicado en la junta general.
RESALTA EL «ENORME ÉXITO» EN GENERACIÓN DE CAPITAL
Por otro lado, el primer ejecutivo de Bankia ha hecho balance del plan estratégico para el periodo 2018-2020, del que ha destacado su «enorme éxito» en la capacidad de generar capital. El plan contemplaba la propuesta de generar 2.500 millones de euros en tres años para distribuirlo a los accionistas.
«No sólo lo hemos conseguido, sino que hemos superado esa cifra, llegando hasta casi los 3.000 millones de euros, 2.932 millones exactamente. O, lo que es lo mismo, en términos de ratio de capital CET1, lo hemos elevado hasta el 15,48%», ha remarcado.
En cualquier caso, aunque ha cumplido su objetivo, el banco finalmente no ha podido distribuir este capital a sus accionistas debido al entorno supervisor y regulatorio como consecuencia de la pandemia.
Esta generación de capital se aplicó a reservas voluntarias, suprimiéndose el pago de dividendos y se propuso utilizarlo para llevar a cabo la operación de consolidación con CaixaBank.
Así, será el nuevo consejo de CaixaBank el que proponga a la junta del grupo resultante el reparto de dividendo, al que tendrán derecho todos los accionistas de Bankia a fecha del reparto, en las mismas condiciones que los de CaixaBank.
DIVIDENDO EN EFECTIVO DE LA NUEVA CAIXABANK
«Me gustaría resaltar que, en cualquier caso, tras la fusión, la nueva CaixaBank será una entidad con una gran fortaleza financiera capaz de generar una rentabilidad sostenible. Y esta es lacondición necesaria para poder maximizar los dividendos en efectivo, que es el objetivo de todos nosotros», ha aseverado.
Como continuación al balance del cumplimiento de los distintos objetivos impuestos por la entidad, Goirigolzarri ha dicho que de las 64 recomendaciones del Código de Buen Gobierno, cinco no resultan de aplicación a la sociedad. Del resto de recomendaciones, se cumplen íntegramente 58 de ellas y parcialmente una de ellas.
NO SE CUMPLE EL 30% DE MUJERES, PERO SUPERARÁ EL 40% EN CAIXABANK
La que se cumple de forma parcial es la número 15, que tiene que ver con el número de consejeras en el órgano de administración al cierre del ejercicio, que fue inferior al 30%. El presidente de Bankia justifica este cumplimiento parcial por las circunstancias derivadas tanto del Covid-19 como del proyecto de fusión con CaixaBank.
«Estas circunstancias no nos han permitido acometer los cambios adicionales necesarios en el consejo de administración de la sociedad», ha precisado.
Por tanto, considera que corresponderá ya al nuevo CaixaBank el cumplimiento de este objetivo de representación. Según ha dicho, cuando se perfeccione la operación, y como se recoge en el proyecto común, el número de consejeras supondrán el 40% de la nueva cúpula.